Ahora que hemos visto las imágenes finales de Haven-1, la primera estación espacial comercial del mundo, nos damos cuenta de que estamos ante una auténtica revolución en el turismo espacial. En agosto de 2025, SpaceX lanzará al espacio algo que parece salido de una película de ciencia ficción de Apple TV+: Haven-1, la primera estación espacial comercial del mundo. Y viendo los renders finales que acaba de publicar Vast, la empresa detrás de este ambicioso proyecto, no puedo evitar pensar que esto es todo un Apple Park en el espacio.
Trabajó 20 años en Apple, ahora da el salto al espacio
Russell-Clarke empezó a trabajar en Apple en 2005 y formó parte del equipo de diseño junto a Jonathan Ive. Casualmente, ahora ninguno de los dos trabaja en Apple. Jony Ive emprendió su propia empresa, y Russell-Clarke quiere dejar un legado en el espacio. Durante su etapa en Apple participó en proyectos como el MacBook Air, el iPhone X, el HomePod y el Apple Pencil. En 2023, dijo adiós a Apple para comenzar su propia "carrera espacial".
Haven-1 será la primera estación espacial abierta al mundo. Todo el que pueda permitirse ir allí, claro. Marcará un antes y un después en el mundo de los viajes espaciales y, como no, el proyecto está respaldado por SpaceX. El objetivo es que la estación espacial Haven-1 se parezca más a un apartamento de lujo que a la fría Estación Espacial Internacional. Al fin y al cabo, muchos de sus visitantes irán por puro ocio y no a investigar sobre el universo.
Haven-1 es un proyecto espacial histórico (y sí, muy bonito)
En algo que vas a habitar durante días, cualquier detalle importa. Y más si te ha costado miles y miles de dólares. Lo primero que llama la atención de Haven-1 es el uso de madera de arce en el interior. Sí, has leído bien, madera en el espacio. Este toque cálido contrasta con la fría imagen que tenemos de las naves espaciales y aporta una sensación de hogar que seguro agradecerán los futuros pasajeros.
El interior de Haven-1 es un 180% más acogedor que el de la ISS, ya que, gracias a su diseño guiado por Peter Russell-Clarke, se consigue una atmósfera que invita a relajarse y disfrutar de la experiencia. Además, su sistema de iluminación se ha diseñado cuidadosamente para ayudar a regular los ritmos circadianos, un detalle crucial cuando estás orbitando la Tierra cada 90 minutos.
En cuanto al alojamiento, Haven-1 introduce un sistema de sueño patentado que es toda una revolución. Un edredón hinchable que se adapta a la microgravedad y permite dormir cómodamente de lado o boca arriba. Esto puede parecer un detalle menor, pero cualquiera que haya visto vídeos de astronautas durmiendo atados a la pared entenderá lo importante que es.
Las mejores vistas, literalmente, del mundo
Una enorme ventana de observación ofrece vistas panorámicas de la Tierra. Es más grande y ofrece mejor visibilidad que cualquier otra nave espacial comercial hasta la fecha. Más allá de las vistas, lo que más ha sorprendido es la versatilidad del espacio. Es una estación espacial con zonas diferenciadas que se adaptan a diferentes usos: trabajar, hacer ejercicio o simplemente contemplar nuestro planeta.
Como algo negativo, sí, el precio. Aunque no se han revelado cifras oficiales, está claro que esta experiencia no estará al alcance de todos los bolsillos, al menos inicialmente. Pero, como dice Hillary Coe, directora de diseño y marketing de Vast (la empresa detrás del proyecto Haven-1), el objetivo a largo plazo es que cualquiera pueda experimentar el espacio. Quizás nuestros hijos sí vean algo parecido a lo que pasó con el mundo de la aviación.
Haven-1 no es solo un hotel espacial
Más allá de su estética refinada, Haven-1 no es solo un hotel espacial. Incluye un laboratorio de investigación, desarrollo y fabricación en microgravedad, el primero de su tipo en una estación espacial comercial. Esto abre la puerta a avances científicos en campos como la medicina, con la posibilidad de cultivar células de piel humana mucho más rápido que en la Tierra. Al no depender de la NASA ni de ninguna agencia espacial reglada, cualquier investigación independiente tiene cabida en Haven-1.
Los afortunados que puedan permitirse un billete a Heaven-1 serán unos pocos. Pero las investigaciones que se realicen en esta estación llegarán a todos. La conquista del espacio siempre ha traído innumerables mejoras que luego se pueden aplicar a la tecnología diaria. Y todo lo que se consiga con Heaven-1 está todavía por explorar.
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