El verano, para muchos, suele ser un buen momento para retomar lecturas. Otros se ponen al día con ciertas series o directamente jugar a esos lanzamientos inabarcables que a partir de septiembre no hay quien concilie. El verano también es tiempo de esperas. Y para matar estos ratos me dio por revisar el historial de juegos más descargados en la App Store. Y ahí estaba, Monopoly GO!, la última encarnación de un juego creado en 1903.
Ha pasado siglo y medio y si hay un juego de mesa que todo el mundo conoce ese es Monopoly. El éxito de Hasbro es tal que puedes encontrar versiones de Monopoly de El Señor de los Anillos, los Simpsons, Rick y Morty... Hay un Monopoly de España, pero es que también lo hay de ciudades como Córdoba o Madrid. Los hay de Star Wars, Toy Story y series de éxito como La casa de papel o Stranger Things. Mxisten Monopoly de grupos de música como Queen o Metallica e incluso de los diez principales equipos del fútbol español.
Con semejante histórico, no es de extrañar que el juego también sea una de las aplicaciones más descargadas en la App Store. El Monopoly GO! de iOS arrasa mes tras mes y acumula no solo millones de descargas, también más de 2 millones de dólares en beneficios cada día.
Monopoly GO!: el éxito de un clásico
Las partidas en Monopoly GO! son, para empezar, mucho más dinámicas que en cualquier versión de tablero. También es así con la sensación de progreso y "crecimiento" dentro de la partida. El primer tablero está basado en Madrid: Gran Vía, Paseo de la Castellana, Puertal del Sol, M 30, Avenida de América, Prado... ya te haces una idea.
Tras los primeros minutos se muestra cómo opera una sencilla mecánica de demolición y progreso: ya no necesitas poseer todas las calles del mismo color para construir hoteles. Las casas y hoteles se consiguen siguiendo otra dinámica basada en niveles de progreso —cinco casas siguen convirtiéndose en un hotel, pero los otros usuarios no "caen" en tus casillas, sino que intentan hundir tu hotel—. Y según aumente la calidad de las viviendas aumentará la cantidad de inquilinos que tengas en ellas.
Puedes utilizar escudos para bloquear el daño que recibirás de otros enemigos y combos para deslustrar las viviendas ajenas. Para "robar" necesitas caer en una estación de tren, lo que puede desembocar en un atraco bancario. Puedes toparte con una caja fuerte casi vacía o dar el golpe de tu vida. Una auténtica locura que cambia la perspectiva clásica y acelera las ganas de venganza si es a ti a quien han robado.
Otras reglas básicas se mantienen, como recoger los 200 al pasar por la casilla de salida. Las mejoras en el nivel de riqueza son imprescindibles para ir progresando. Y todo ello se transmite de forma muy visual e intuitiva. Da igual si nunca has jugado a Monopoly, lo entenderás a la primera.
Pero esta es solo la primera capa del juego: partir del nivel 35 te empiezan a mandar misiones o encargos. Es decir, completar ciertos objetivos en cierta cantidad de movimientos, por ejemplo. Y con los puntos de referencia puedes mudarte a otras áreas, que en realidad son otros tableros. Cada tablero ofrece una temática distinta... y se introducen nuevas reglas.
Este es el punto en el que me encuentro, cuando Monopoly hereda ciertas dinámicas de gamificación propias de un Los Sims y las integra de maravilla con su núcleo jugable. Lo más atractivo de todo es este apartado social, jugar con y contra amigos, ver qué tal van en sus partidas, si te han adelantado y ya acumulan un par de millones. Y cada cierto tiempo aparecen eventos especiales donde es importante trabajar en equipo.
Lo que es cierto es que entre construir, robar unos cuantos créditos, descubrir qué tienen que ofrecer las nuevas tarjetas de SUERTE y avanzar en el álbum de retos, hay juego para rato. Cuando se acabe el verano, ya veremos.
Descargar MONOPOLY GO! en App Store
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