En el nuevo sistema operativo para nuestro iPhone, iOS 16, Apple ha añadido una opción para realizar una captura de pantalla y, con un solo toque, copiarla sin tener que guardarla. No es tan completo como el menú de edición de captura de pantalla en Mac, pero es aún más intuitivo. Y gracias a ello podemos pegar dicha captura donde deseamos sin luego tener que ir a la app Fotos a borrarla.
Una captura lista en el portapapeles en dos segundos
La comodidad de poder copiar una captura y saber que queda en el portapapeles lista para pegar sin tener que ocuparnos de borrar dicha captura más adelante, u olvidarnos de ello y acabar con un montón de fotos duplicadas que eliminar, es genial. Un recurso que podemos utilizar en muchas situaciones, los pasos para ello son estos:
- Tomamos una captura de pantalla en nuestro iPhone presionando el botón lateral y el botón de subir el volumen.
- Tocamos la pequeña previsualización de la captura que aparece en la parte inferior izquierda.
- Si lo deseamos, recortamos la toma o resaltamos cualquier elemento con las herramientas de marcación.
- Tocamos el botón OK de la parte superior izquierda.
- Elegimos Copiar y eliminar.
Y ya está. La captura, recortada y marcada, quedará en el portapapeles para que la peguemos en una app de retoque fotográfico, en una conversación de Mensajes o Telegram o en un correo que estemos redactando, por citar solo tres ejemplos. Tengamos en cuenta, por otra parte, que si el destino de la captura es la app Archivos o una nota en Notas, lo más rápido es tocar Guardar en Archivos o bien Guardar en Nota rápida desde el mismo menú.
Si a este mecanismo de copiar y pegar le añadimos el portapapeles universal, estamos hablando de que tomar una captura en el iPhone y pegarla en nuestro Mac es cosa de tres pasos: capturar, "copiar y eliminar" y pegarla en el ordenador. Una simplificación de lo más interesante que evitará que la fototeca se llene de capturas y nos aportará la mayor comodidad y productividad.
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