Si en tu casa el router está en una esquina del hogar, seguro que te has encontrado con la desagradable experiencia de tratar de conectar tus dispositivos Apple desde la otra punta y no tener señal suficiente, que no llegue, o que aun llegando, no funcione. Pocas sensaciones hay más frustrantes que esa, aunque por suerte tiene solución.
En muchos hogares ya empezamos a sufrir la congestión de red derivada de conectar más y más aparatos al HomeKit y la red WiFi. Es entonces cuando uno empieza a pensar en alternativas. Que si un repetidor WiFi, que si un TP-Link, que si un cable Ethernet que atraviese tu casa de la forma más antiestética posible, etc. Sin embargo, seguro que hay algo que ni siquiera te has planteado, y podemos asegurarte al 99% de probabilidades que lo tienes en casa: el cable de la antena.
Internet de alta velocidad a cualquier rincón de tu casa
Estarás pensando que cómo vas a conectar el cable de la antena al router, y luego a un iPhone o a un Mac. Pensarás que nos estamos quedando contigo, o que nos hemos vuelto locos, pero no. Es una opción real y relativamente viable, aunque hay que invertir un poquito de dinero.
Lo bueno de los cables de antena es que ya están instalados. No hay que taladrar, ni hacer malabares con ellos para distribuirlos, ni nada. Suele haber una toma en cada habitación, y de eso es de lo que nos vamos a servir para poder hacer llegar el internet a cualquier rincón del hogar.
Es importante, antes de continuar, comprobar que tengas una toma de cable de antena cerca de tu router, así como otra en la habitación a la que quieres llevar el internet. Lo interesante es que, salvo cosas raras, todas las tomas de antena de las casas suelen estar unidas por un único cable, por lo que nos podemos ayudar de él para que haga de “autopista” y lleve internet a cualquier otra toma.
Por unos 200 euros puedes hacerte con un par de adaptadores que te permitirán llevar a cabo esta operación. También hay varios por precios similares, como un pack de dos ScreenBeam por 174 euros.
Cómo disfrutar de Internet por cable de antena en tu hogar
El proceso para utilizar tu cableado coaxial para disfrutar de internet de alta velocidad es sencillo:
- Conectas uno de los extremos del cable a la toma de antena de al lado de tu router
- Conectas el router al adaptador con un cable RJ45. Por suerte ya no son necesarios los viejos microfiltros de interferencias.
- En la otra habitación que quieras comunicar tendrás que conectar el otro adaptador, y de ahí sacar un cable a otro router, un repetidor por cable, o un producto que acepte directamente ese tipo de puerto.
No hay que configurarlos, ya que se encontrarán a sí mismos pasados unos segundos. A diferencia de una red WiFi mesh, donde necesitarás aparatos compatibles y un receptor específico, esta es una técnica preferente para hogares antiguos con paredes anchas.
Y listo, ya podrás disfrutar de conexión a internet en cualquier producto Apple de la casa, estés donde estés. Es evidente que pierde algo de velocidad, pero no mucha, y para ahorrarse el engorro que supone estar buscando otras alternativas, esta es quizás la más sencilla de todas. Eso sí, es una solución algo cara en comparación con el resto.
En Applesfera | WiFi lento en el iPhone: esto es lo que podemos hacer para arreglarlo
En Applesfera | iPhone 16: fecha de lanzamiento, precio, modelos y todo lo que creemos saber sobre ellos
Ver 4 comentarios