Las restricciones provocadas por el coronavirus COVID-19 están creando incertidumbre respecto al anuncio de los próximos iPhone. Se espera que Apple presente la siguiente generación de sus smartphones, como viene siendo habitual, en el mes de septiembre. No obstante, en las últimas semanas se está poniendo en duda que veamos los nuevos terminales de la manzana mordida en dicho mes.
Hay medios que aseguran que Apple está valorando la posibilidad de retrasar el iPhone 12 con 5G al año 2021. El motivo tras la decisión estaría el miedo de la compañía a una mala recepción por parte de los consumidores, pues el COVID-19 también está afectando de manera negativa a la economía de millones de personas.
Sin embargo, hay otros que son más optimistas y afirman que los nuevos modelos de iPhone no sufrirán ningún retraso y que estarán disponibles en la fecha esperada. También se está diciendo que Apple está teniendo problemas de abastecimientos con algunos componentes para los dispositivos.
Sea como sea, el _Wall Street Journal_ ha comunicado que los ingenieros de Apple están ayudando a sus compañeros chinos con el ensamblaje de los prototipos de los próximos iPhone desde la distancia a través de la aplicación FaceTime.
La solución para las restricciones de movilidad entre Estados Unidos y China
Que muchos trabajadores de Apple viajan constantemente no es ningún secreto. En octubre supimos que la compañía reservaba unos 50 asientos diarios en aviones de la aerolínea United Airlines para que sus empleados puedan realizar viajes a Shanghái y otras partes del mundo desde el Aeropuerto Internacional de San Francisco.
Muchos de estos traslados son para controlar cómo va la producción de nuevos productos. El problema es que con la situación actual y las restricciones de vuelo no es posible viajar, por lo que los ingenieros han tenido que buscar otra manera de ayudar a sus compañeros de China en la fabricación de los prototipos de los próximos iPhone de Apple.
Cada año, los ingenieros de Apple viajan a las cadenas de montaje para contar los detalles de ensamblaje de los nuevos modelos de smartphones que se pondrán a la venta en otoño. El proceso alternativo que la compañía ha elegido para este control son videollamadas a través de su aplicación FaceTime.
Lo cierto es que la producción de nuevos productos está siendo un desafío para Apple. Hace unos días supimos de los problemas que tienen los empleados de la compañía para seguir trabajando desde sus casas, a excepción de algunos que tienen un certificado especial para acceder al Apple Park. Y es que deben mantener el secretismo. Algunas apps que usan son Slack, FaceTime, Box, Jabber o WebEx.
Vía | Cult of Mac
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