Pese a que la última actualización de Mac OS X a la versión 10.5.7 estaba enfocada principalmente a pulir los últimos bugs descubiertos en el sistema operativo de Apple más que a aportar novedades (que se supone llegarán próximamente con Snow Leopard), parece que algunos de los cambios ha causado un aumento de un 33% en la duración de la batería en… ¿un hackintosh?
En los foros del popular netbook MSI Wind están bastante seguros de la mejoría, reportando que con una batería de seis celdas han pasado de las 3,45 horas habituales a cerca de 5. Esto nos deja dos posibles opciones: o bien Apple ha trabajado duro para mejorar la gestión de energía (y se lo ha callado por algún motivo, nada raro realmente), o sencillamente ahora el hardware de los hackintosh (o de este modelo en particular) es reconocido como un poco “más nativo”, beneficiándose de los sistemas de gestión de energía ya existentes en Mac OS X.
La respuesta podría encontrarse en los procesadores Atom, utilizados con frecuencia en alguno de los hackintosh más comunes, aunque hasta que más usuarios actualicen a la última versión y nos cuenten sus impresiones no podremos estar seguros. ¿Tenéis un Wind a mano?
Vía | Hardmac
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