Estar huyendo de alguien, no sabes quién, y de repente acabar en un globo aerostático estrellado en algún lugar del que no puedes salir. Un sótano, una casa, ¿o una lavandería regentada por unos seres deformes? Poco importa, porque Very Little Nightmares es justamente eso, un juego de aventuras con puzzles a veces sencillos, otras complicados, pero siempre terroríficos. Por eso se ha convertido en nuestra App de la Semana.
Hay que salir de aquí lo antes posible
Esa es la frase que te viene a la cabeza nada más aterrizar en Very Little Nightmares. La protagonista es una niña con un impermeable amarillo del que siempre lleva la capucha puesta. Una especie de Caperucita Roja moderna. Valiente, siempre mirando hacia adelante. Un personaje que te da seguridad en un entorno de pesadilla.
El juego se juega en vertical. Cada nivel es un tablero en vista isométrica, a través del que nuestra protagonista se desplaza andando o corriendo. Para hacerlo, debemos tocar alguno de los puntos de tablero al que se puede desplazar. Si damos un toque, andará; si damos dos toques rápidos, correrá. Cuando estemos cerca de un objeto con el que se pueda interactuar, su silueta destacará en color blanco. Esos son los únicos controles que necesitas saber.
Los dos espeluznantes enemigos que se ven en el juego, junto con el monstruo que te persigue por la basura.
Recorrerás la mansión en todos sus niveles, resolviendo los puzzles para avanzar. Y esquivando a sus tétricos habitantes, encargados de su mantenimiento: dos espeluznantes seres deformes, uno en una silla de ruedas y otro que levita y tiene la espalda doblada de forma imposible.
Morirás. Muchas veces. En ocasiones será tontamente (¿caeré si piso esa tabla rota? Respuesta: sí). Otras de una forma inesperada (vaya, nunca pensé que esa luz me abrasaría). Y cuando te topes con uno de esos enemigos descubrirás la cantidad de maneras que hay de aplastar a una niña diminuta y su chubasquero amarillo.
Entretenimiento, mejor con los auriculares puestos
Nada más arrancar el juego, te recomendarán ponerte los cascos. Y si lo haces, verás que es un acierto porque te zambullirás de lleno en el juego. Los niveles, la estética (me recuerda un poco a Machinarium), el estar dándole toques a la pantalla todo el rato, unido a la música y ruido ambiente dan una experiencia única.
Si ese foco de luz me da de lleno, ¿qué pasará?
Mientras investigaba para escribir este análisis, he descubierto que Very Little Nightmares es la precuela móvil del juego Little Nightmares, una aventura gráfica de terror. Desconozco cómo era este juego, pero esta precuela sin duda es uno de los más entretenidos que he jugado últimamente.
A veces se hace incómodo jugar en vertical porque quieres ver más del nivel hacia los lados y te obliga a desplazarte para verlo, acercándote peligrosamente a los malos. Pero en general la experiencia ha sido muy buena. Es un juego que cuesta 7,99 euros, sin expansiones ni compras in-app, por lo que es una ocasión excelente de jugar, disfrutar y despreocuparte de los micropagos.
Sus 18 niveles pueden hacerse algo cortos, pero sin duda es una pequeña aventura que vas a disfrutar a lo grande.
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