La semana comienza con una exclusiva del Wall Street Journal: según el prestigioso medio Apple habría retrasado un mes la producción en masa de los iPhone 12, debido principalmente por los problemas fruto de la pandemia del virus COVID-19. Se reduciría la fabricación un 20% de julio a diciembre, lo que retrasaría la agenda de lanzamientos de Apple.
La consecuencia es que en vez de tener nuevos iPhone a la venta a mediados de septiembre, los tendremos probablemente a mediados o a finales de octubre. La presentación de la nueva gama de teléfonos también podría retrasarse un mes, o bien seguir programada para mediados de septiembre y simplemente anunciar un lanzamiento para un mes más tarde.
Un mes de espera entre su presentación hasta su lanzamiento
No sería la primera vez que veríamos lanzamientos de los nuevos iPhone algo más tarde de lo normal. El iPhone X fue lanzado a principios de noviembre de 2017 y fue anunciado a mediados de septiembre, por ejemplo. Otro ejemplo es el iPhone XR: presentado el 12 de septiembre de 2018 y lanzado el 26 de octubre. Si en Cupertino deciden seguir esta tónica simplemente tendremos que esperar algo más de lo normal desde que el terminal se presente hasta que se lance.
Algo seguro es que los tendremos antes de que octubre y noviembre terminen, ya que la temporada navideña siempre es una catapulta de ingresos por las compras del nuevo iPhone y por lo tanto desde Apple jamás se perderían esas fechas.
El medio aprovecha la noticia para corroborar los rumores que circulan últimamente: el iPhone 12 se compondrá de una gama de cuatro terminales que varían aún más el abanico de tamaños de pantalla disponibles desde las 5,4 pulgadas hasta las 6,7 pulgadas pasando por dos modelos intermedios de 6,1 pulgadas. Su diseño heredará el aspecto de los iPad Pro, y la fuente también apuesta por algunos modelos equipando 5G.
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