Según la información oficial, el iPhone 12 es capaz de aguantar sumergido hasta 30 minutos a una profundidad máxima de seis metros. Como en otras ocasiones CNET ha querido comprobar esta información y ha obtenido resultados de lo más interesantes.
Un test de líquidos mucho más allá de las especificaciones
El equipo responsable de estas pruebas se ha valido del lago Tahoe y de un iPhone unido a un dron submarino con cámara para poder ver qué ocurría al teléfono durante la inmersión. Tras los 30 minutos a 6 metros de profundidad a una temperatura de 11 grados el iPhone 12 ha continuado funcionando con total normalidad.
En el vídeo destacan que el sonido del altavoz era ligeramente sordo o apagado, algo que, sin duda, volverá a la normalidad cuando el teléfono se haya secado por completo y haya podido expulsar el agua de la cavidad acústica.
En un segundo test, sumergen el iPhone 12 a 20 metros durante 40 minutos. Como era de esperar todo en el iPhone ha seguido funcionando normalmente sin contar con el sonido de los altavoces, que seguía siendo sordo.
Tras secar el dispositivo durante 72 horas se aprecia cierto grado de humedad bajo el cristal de la cámara frontal. Además, al encender el teléfono aparece una pantalla de diagnóstico, que parece diseñada para recoger información sobre la situación del teléfono, consciente de que algo no va como debería.
Ya hemos visto en otras ocasiones como algunos dispositivos de Apple han aguantado impensables cantidades de tiempo sumergidos o flotando en los océanos. Más allá de la curiosidad de estos sucesos, de lo que podemos estar seguros es de que nuestro iPhone 12 saldrá indemne de casi cualquier chapuzón ocasional.
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