Globalización, ese término tan amplio y que trae consecuencias como que una de las principales potencias del mundo dependa en buena parte de otra. Es lo que le sucede a Estados Unidos con la dependencia de China para dispositivos electrónicos. Pese a que compañías como Apple estén llevando buena parte de su producción a India, al final China sigue siendo la gran fábrica del mundo (aunque no quieran).
Una de las prioridades que se esgrimen desde Estados Unidos es cortar las relaciones con empresas muy vinculadas al gobierno chino. De ahí la guerra con TikTok o, como está sucediendo ahora, la investigación a empresas que estén conectadas con compañías estadounidenses como Apple.
El acuerdo de Apple con BOE podría irse al traste
Apple empezó a añadir paneles OLED a sus dispositivos en 2017 de la mano del iPhone X y ha continuado implementándolo en generaciones sucesivas y ahora también con los iPad Pro M4. Desde entonces, las coreanas LG Display y Samsung Display han sido sus principales proveedoras, aunque también BOE Technology.
Estos últimos han sido (y siguen siendo) los grandes proveedores de Apple para el suministro de paneles LCD, los cuales siguen utilizando en la mayoría de iPad, así como en ordenadores y en modelos de iPhone como el iPhone SE 3. Sin embargo, la relación entre ambas compañías estaría pendiendo de un hilo. Y no por culpa de ninguna de las partes. O no al menos de forma directa.
Tal y como revelan en Neowin, los legisladores estadounidenses ven a BOE como una empresa demasiado cercana al gobierno chino. Tanto es así que, según el citado medio, está habiendo conversaciones entre las máximas autoridades de defensa de Estados Unidos con representantes homólogos del Partido Comunista Chino, que es el que gobierna la región desde hace décadas.
John Molenaar, presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, habría afirmado estar preocupado de que BOE y Tianma Microelectronics estén aprovechándose de su posición clave en las cadenas de suministro para hacerse con secretos militares claves. Ante ello, cree que podría estar en riesgo la seguridad nacional estadounidense.
Por tanto, si al final Estados Unidos acaba prohibiendo las relaciones comerciales a sus empresas con BOE, Apple podría verse seriamente afectada. Y más cuando están a punto de alcanzar un acuerdo millonario para el iPhone SE 4, el cual se lanzará en 2025 y se espera que traiga paneles OLED que, en idea de Apple, serían fabricados por BOE.
Imagen de portada | Goodfon
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