Todos hemos visto lo que son capaces de hacer algunos robots de cuatro patas que ya se comercializan y lo que se nos viene encima cuando los bípedos perfeccionen sus técnicas, pero todos radican en una serie de movimientos que necesitan mucho trabajo y práctica previa.
¿Pero y si fuera el propio robot el que pudiera tomar sus propias decisiones ante el terreno sobre el que debe avanzar? Esa es la idea con la que un equipo del MIT ha creado un perro robot capaz de reconocer el entorno en el que se encuentra, y se han valido del chip M1 para conseguirlo.
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Lo que veis en el vídeo superior es el resultado del Laboratorio de Inteligencia Artificial del MIT: un robot de cuatro patas capaz de superar obstáculos del terreno sobre el que tiene que avanzar, valiéndose solamente de una cámara frontal y un algoritmo capaz de procesar sus avances usando la memoria volumétrica neural.
Si te fijas, el robot tiene una pequeña caja blanca en su lomo. Dentro de ella, según confiesan los autores, habita la placa base de un Mac con chip M1 cuyos núcleos se emplean en la red neural necesaria para poder hacer todo el procesado de datos. No se dan detalles acerca del Mac que han tenido que desguazar para poder hacer esto o de cómo han integrado la placa para convertirla en el "cerebro" del robot, aunque han prometido desvelarlo junto con el código fuente empleado en Github. Una cosa es segura: la garantía de ese Mac se ha ido a tomar vientos.
El beneficio de esto es que el robot no necesita de un trabajo de campo previo para reconocer el terreno: él solo lo reconoce y decide los pasos a dar sin caerse. Tienen toda la información junto con varios GIFs más en esta web. Y si el chip M1 es capaz de procesar todos los datos sin problemas, imaginemos hasta dónde podríamos llegar con un M2 Pro o uno de los futuros M3.
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