¿Quién necesita un termómetro teniendo un iMac? Esto es lo que debió pensar el propietario de un iMac de 2009 que vive en Nueva Inglaterra antes de convertir este ordenador en una estación meteorológica online. Un proyecto que nos muestra la enorme resistencia de esta máquina ante un clima realmente severo y la creatividad que podemos aplicar a nuestros antiguos ordenadores al renovarlos.
Registros de temperatura dignos de un M1
Tal como podemos ver en coldmac.macfixer.com, este Mac se aloja en un cobertizo cerca de la casa de su propietario en Nueva Inglaterra, una región con un clima especialmente frío. El ordenador está configurado para medir sus propias temperaturas internas: procesador, puente, placa lógica y HDD, así como las externas, incluyendo el punto de rocío y la humedad ambiental.
Según explica el propietario, el cobertizo donde vive este iMac no tiene ningún aislante térmico, la puerta no está sellada y hay dos orificios de ventilación en las paredes. Aun así la temperatura suele ser unos 5 grados mayor que la exterior durante la noche. Algo que no ha impedido a este ordenador registrar mínimas de -13,72ºC.
Estas lecturas provienen de un termómetro USB con el que el ordenador lee la temperatura ambiente mientras que usa sus propios sensores para saber su temperatura interna. Todos estos datos se recogen y muestran en las gráficas que podemos ver en el sitio web. Un sitio web que, hay que reconocérselo a la valiente máquina, aloja el mismo iMac.
Unos simples scripts recogen las lecturas de los sensores y los almacenan en una base de datos y una página web coge los valores de esta base de datos y los muestra en forma gráfica. Este proyecto consigue demostrar que la temperatura mínima de funcionamiento oficial de Apple de 10ºC es sin duda conservadora, ya que el ordenador ha alcanzado casi 14 grados negativos sin verse resentido su funcionamiento. En esos momentos, la temperatura del procesador se encontraba rondando los 2,22ºC, unas décimas por encima de la de la placa lógica y bastante alejada de los 7,22ºC del disco duro. Temperaturas que incluso un Mac con M1 pueden mirar con asombro.
Está claro que las posibilidades creativas con nuestros antiguos dispositivos son infinitas. Hace un año veíamos una GameBoy convertida en mando para el Apple TV y hoy conocemos al iMac meteorólogo.
Imagen | Robert Gram
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