En el Apple Park han decidido ser prudentes. Aunque no esté ocurriendo a una escala como la del resto de olas del pasado (de momento), los Estados Unidos están experimentando un aumento de casos de COVID-19 que ha llevado a Apple a paralizar sus planes de vuelta a la oficina.
El plan que tenía la empresa era una vuelta al trabajo progresiva que empezó el 11 de abril y que ahora mismo obliga a los trabajadores de Apple a estar dos días en la oficina de forma presencial. La semana que viene iba a cumplirse el último plazo para pasar a la "nueva normalidad", que era venir tres días a la semana a las oficinas y trabajar los dos días restantes en casa.
Sin embargo, este aumento de casos de COVID-19 ha hecho que Apple aplace ese último cambio y se quede con la obligación de venir sólo dos días por semana de forma indefinida. Además los empleados también tendrán que llevar mascarillas en las zonas interiores comunes de las oficinas.
Esto no cambia los planes de la parte presencial de la WWDC 2022. Aquellos desarrolladores que hayan participado en la lotería y hayan sido afortunados ya deberían haber recibido los datos para poder viajar y acceder al Apple Park el 6 de junio para ver la keynote juntos.
Apple no ha detallado qué va a pasar ahora, pero se supone que requerirá los tres días presenciales en la oficina más tarde y cuando los casos de COVID-19 vuelvan a descender en los Estados Unidos. De momento el Apple Park seguirá con una presencialidad más reducida, aunque no prohibe explícitamente acudir más días del mínimo requerido.
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