No habían llegado las Navidades, pero Apple ya había recibido carbón al conocer como el ITC emitía una prohibición de ventas de los Apple Watch Series 9 y Ultra 2 en Estados Unidos a causa de una infracción de patentes de Masimo. Y así ocurrió, aunque volvieron a la venta sólo unos días después a causa de una apelación de Apple. Lejos de resolverse, el conflicto continúa y no parece tener un fin muy cercano.
Apple ganó dos semanas más de plazo que finalizan el próximo lunes 15 de enero y en el que puede seguir vendiendo sus relojes. Sin embargo, el ITC se ha pronunciado ya y no precisamente a favor de Apple. En sus declaraciones al tribunal de apelación son contundentes y dejan en el aire que los citados Apple Watch vayan a poder seguir vendiéndose.
Apple emitió su apelación y una solución para evitar que sus Watch vuelvan a retirarse del mercado
El conflicto de Apple con Masimo surge de lo que estos últimos consideran una infracción de patentes en el uso del sensor de oxígeno en sangre que incorporan los Apple Watch Series 6 en adelante (excepto los 'SE'). Que sean los Apple Watch Series 9 y el Apple Watch Ultra 2 los únicos que Apple vende ahora en Estados Unidos con este sensor es lo que les pone en el punto de mira.
Masimo presentó una reclamación al ITC (International Trading Center), que como máximo órgano de comercio del país dictaminó la ya citada prohibición de venta de esos dispositivos, que comenzó el día de Navidad y se paralizó el día 28 de diciembre. Una paralización que realmente venía motivada por la apelación de Apple y no porque estuviese ya todo resuelto.
En esa apelación, la firma dirigida por Tim Cook no sólo se mostraba contrariada argumentando que la prohibición de venta era excesiva, sino que presentaron una solución de software con la que a priori dejaban de infringir las patentes de Masimo. También solicitan al tribunal de apelación que paralicen la decisión del ITC de prohibir las ventas en lo que dura este proceso.
El ITC se muestra contundente y no parece dispuesto a evitar la prohibición
En este proceso no sólo intervienen Apple, Masimo y el ITC, sino también otros implicados como la Aduana de Estados Unidos, quienes tienen hasta este viernes para emitir su apelación (otros tienen hasta el lunes). En el caso del órgano de comercio, la fecha límite es también para mañana viernes, pero ya han emitido su apelación.
Claramente, el ITC se opone a la moción de Apple, afirmando que la compañía "presenta una solución débil y con poco convencimiento". Su apelación prosigue con más dureza al afirmar que los de Cupertino no tienen en cuenta el "daño irreparable" causado a Masimo y que su solicitud de no prohibir las ventas en lo que dura el proceso equivale a "pedir permiso para seguir infringiendo patentes".
El ITC también vuelve a reafirmarse en que la prohibición no se dictó con ningún error legal, por lo que piden al tribunal de apelación que "vuelvan a sopesar las pruebas" que sostienen la necesidad de retirar del mercado los Apple Watch Series 9 y Ultra 2.
Así las cosas, nadie se atreve a predecir qué ocurrirá. A corto plazo todo queda en manos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, quienes ya comentábamos que deberán pronunciarse mañana. En esta declaración deberá respaldar o no a Apple, confirmando si consideran suficiente la solución propuesta con el cambio en el software o si, por el contrario, lo consideran insuficiente como el ITC.
En caso de que la declaración de Aduanas vaya por ese segundo camino, los Apple Watch volverían a retirarse de la venta en Estados Unidos. El proceso continuará tras ello, pero Apple se encontrará en una situación aún más delicada de la que tiene ahora mismo.
Vía | 9to5Mac
Imagen de portada | Hussam Abd en Unsplash
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