Las capturas de pantalla son una de las cosas más útiles que tiene cualquier sistema operativo. Si trabajamos en presentaciones, creamos manuales, o escribimos en algún blog técnico (casualmente) nos es de gran ayuda apoyar el texto escrito con imágenes directas de lo que pretendemos mostrar. Sin embargo, si el sistema operativo crea dichas capturas con un formato que no nos gusta, o las guarda de forma predeterminada en una carpeta incómoda del disco duro, toda la inmediatez y utilidad de las capturas se pierden.
Para remediarlo, existen varios programas y trucos que nos permiten modificar las condiciones predeterminadas del sistema operativo tales como el formato de las imágenes o el directorio de almacenamiento de ellas. Una de las que más me han gustado, por su facilidad y extrema simplicidad es Save Screenie.
Con Save Screenie, tendremos disponible en la misma aplicación la capacidad de seleccionar el formato de las imágenes de captura del sistema operativo y el directorio donde se guardarán. Por supuesto podremos en cualquier momento volver a los ajustes originales “de fábrica”, pero sin duda nos será muy útil personalizar estos dos parámetros para no sólo hacer las capturas lo más rápido posible: Sino también disponer de ellas cómo y donde las necesitemos sin más esperas.
Sitio oficial | Save Screenie
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