Un año. Ese es el tiempo que ha transcurrido desde que salió Rocksmith 2014 para Mac OS X y PC entre otras plataformas. También hace casi un año desde que escribí la revisión de la aplicación a la que más tiempo de ocio he dedicado desde que salió. Es hora de hacer una nueva revisión de Rocksmith 2014 centrándome en cómo me ha ayudado a aprender a tocar un instrumento musical y a divertirme a lo grande.
Las partes más tediosas y repetitivas a la hora de aprender a tocar la guitarra desaparecen con Rocksmith 2014
¿Qué es Rocksmith 2014?
Antes de entrar en materia, un breve repaso de lo que es Rocksmith 2014. Si aplicamos las nuevas tecnologías a la enseñanza musical de un instrumento como la guitarra eléctrica o el bajo y le echamos una buena dosis de entretenimiento, haciendo que las partes más tediosas y repetitivas sean hasta divertidas tenemos Rocksmith 2014.
La versión completa de Rocksmith 2014 incluye un cable USB a jack de 6,3 mm, necesario para que el juego funcione, y con el que podremos conectar directamente nuestro bajo o nuestra guitarra eléctrica a nuestro Mac. Con ese cable conseguiremos tanto emular el sonido real de las canciones con todo tipo de efectos y que el software detecte qué cosas hemos hecho bien y mal. Tenéis más detalles en la primera revisión: Rocksmith 2014, aprende a tocar la guitarra y el bajo en tu Mac: A Fondo.
En total, entre las canciones incluidas en Rocksmith 2014 (unas cincuenta), más las canciones que podemos importar del Rocksmith original y los DLC o contenidos descargables que pueden comprarse tanto desde la propia aplicación como desde Steam contamos con 500 canciones oficiales para Rocksmith 2014. Y tampoco han tardado mucho en salir DLCs no oficiales, con lo que el número de canciones se dispara hasta más de 9000.
Quiénes somos, de dónde venimos, a dónde vamos
Compré mi guitarra eléctrica, una Washburn Wi 200 Pro, en junio de 2008. Recibí algunas clases, que tengo que decir no me sirvieron más que para corregir algún posible defectillo y ver de qué iba esto de aprender a tocar un instrumento musical. Algo que no había hecho en mis 41 años, pero que tenía que hacer para aprobar esa asignatura pendiente que todos tenemos con nosotros mismos y que en mi caso era tocar la guitarra eléctrica.
Practiqué acordes y escalas, algunos ejercicios de mano izquierda y derecha, y me enfrenté a mis primeros riffs o frases con la guitarra. Como la vida da muchas vueltas aparqué la guitarra hasta la salida del Rocksmith original, el cual compré para PS3 ya que no había versión para Mac. Con el Rocksmith original descubrí que sí que se podía aprender a tocar la guitarra, pese a sus errores y a sus aciertos y su naturaleza a medio camino entre Guitar Hero / Rock Band y lo que debería ser una aplicación para aprender a tocar la guitarra.
La constancia brilló por su ausencia, con lo que el progreso era algo así como un, dos, tres, un pasito pa'alante (María) y dos pasitos para atrás. Instalé Parallels en el Mac para poder tener Rocksmith en el ordenador y al menos tener la opción de tocar en el mismo, pero tampoco encontré la rutina necesaria para progresar. Llegué a tocar algunas canciones sencillas, a mejorar el tiempo de cambio entre acordes y poco más.
La memoria muscular (y la madre que la parió)
Si estás leyendo esto es porque sabes escribir y probablemente hayas hecho muchas espirales en cuadernos Rubio. Puede que sepas mecanografía y seguro que en tu día a día haces muchas cosas sin necesidad de pensarlas paso a paso, como por ejemplo conducir. En estos casos estás usando la memoria muscular. Cuando vemos a esos guitarristas tocar a toda velocidad, moviendo sus dedos a toda pastilla por el diapasón, están haciendo uso de habilidades ganadas a base de repetición y que coloquialmente se llama memoria muscular, no penséis que da tiempo a pensar todos esos movimientos de forma consciente.
Para llegar a ese nivel, no queda otra que practicar, practicar y volver a practicar hasta que salga automáticamente. Como cuando aprendemos a escribir a máquina y no tenemos que pensar en qué dedo mover para cada letra que queremos escribir. Rocksmith no hace magia, pero hace que el aprendizaje sea muchísimo más ameno que si lo hiciéramos por nuestra cuenta. Tener la posibilidad de tocar canciones “a nuestro nivel” simplificando lo que tenemos que tocar y que el nivel vaya aumentando de forma automática según progresamos no tiene precio. Aunque personalmente prefiero utilizar el repetidor de frases y bajar la velocidad a un nivel aceptable e ir subiéndola.
Ahora soy capaz de tocar alrededor de 15 canciones de memoria sin mirar a la notación 3D de Rocksmith, y tengo unas 30 canciones a un porcentaje mayor del 90% de aciertos. Es decir, fallando aproximadamente un 10% de las notas o acordes o menos. No tengo que pensar en qué tiene que hacer mi mano izquierda y mi mano derecha en determinadas canciones, sino que la memoria muscular hace su magia y todo fluye automáticamente.
Bastante impresionante para 330 horas de vuelo con Rocksmith 2014. Ha habido días donde no he cogido la guitarra y otros donde me he dado un atracón, lo que no ayuda para nada a la memoria muscular y a la automatización de tareas simples y a la economía de movimientos. Pese a todo, el progreso está ahí y la diversión también.
Rocksmith es un abanico de posibilidades. Los tutoriales para familiarizarnos tanto con Rocksmith 2014 como con las técnicas de guitarra; los mini juegos arcade que nos permiten progresar en escalas, progresiones, acordes, vibratos, armónicos,...; La posibilidad de jugar en modo Score Attack, que lejos de convertirlo en un videojuego con puntuación lo que hace es asegurar que tocamos bien, ya que es un modo mucho más picajoso con tiempos y con la limpieza de las notas; el repetidor de frases, que nos permite practicar toda o parte de la canción ajustando la velocidad, dificultad (número de notas/acordes), etc; El modo maestro, que nos permite tener una banda virtual que responde a lo que estamos tocando; Libro de acordes para practicarlos antes de enfrentarnos a los que componen un tema; Distintas carreras (guitarra solista, guitarra rítmica, bajo simulado con guitarra) que multiplican las posibilidades; La lista es tan larga que podría seguir y seguir.
Doy consejo a fuer de viejo….
¿Qué haría de forma diferente si tuviera que empezar de 0 con Rocksmith 2014?
Tras estas dos entradas puede que haya conseguido picarte el gusanillo de comprarte el Rocksmith 2014 y desempolvar esa guitarra a la que no haces caso, pedir una prestada o irte a la tienda a por una. O seguir progresando en tu aprendizaje con la guitarra o el bajo. En cualquier caso, aquí van mis recomendaciones.
Lo primero es familiarizarte con la notación de Rocksmith, para lo cual tienes las lecciones. Puedes jugar en modo nativo o en modo tablatura, lo que más cómodo te resulte. Practica todos los días lo que puedas. 15 minutos es mejor que nada. A partir de 30 minutos mejor, y si ya es una hora o más no digamos. La memoria muscular y la automatización se adquieren así, y también el ritmo y cómo moverte por el diapasón.
No te obsesiones con la velocidad, mejor tocar despacio ralentizando la canción bien, que tocarla mal y fallar más notas que una escopeta de feria. La velocidad llega con el tiempo. Utiliza los juegos arcade para ganar confianza, precisión y buenas prácticas. Juega a String Skip Saloon para dar autonomía a tu mano predominante y a Super Ducks para familiarizarte con los trastes. Chords of the Dead es también tu amigo, con el que aprenderas acordes y progresiones sencillas matando zombies. Y si te decides por la carrera de guitarra rítmica también te vendrá bien Star Chords para conocer más acordes y cambiar entre ellos más rápidamente. Luego ya llegarán otros juegos.
El progreso en todos los aspectos viene poco a poco. No te obceques con una lección, juego o con una canción. Ordena las canciones por dificultad y selecciona una que te guste entre las más sencillas y atácala cada día un poco, junto con los tutoriales y los juegos.
Tendrás dias mejores y peores. En los peores yo lo que hago es elegir una canción nueva que no haya intentado todavía. Así, como ya está en el 0% de dominio, cualquier cosa que hagas mejorará dicho porcentaje y te sentirás mejor.
Para las canciones con rasgueos o técnicas complicadas, busca en YouTube cómo hacerlos. Rocksmith 2014 no indica si la dirección de rasgueo es hacia arriba o hacia abajo, uno de los aspectos que deberían mejorar.
Y si todo esto lo complementas con un buen profesor de guitarra seguro que en mucho menos tiempo que yo obtendrás excelentes resultados. No he visto todavía a ningun profesor que utilice Rocksmith 2014 como herramienta de aprendizaje. Una verdadera lástima porque si a la voluntad de aprender y a las clases de un buen profesor le sumamos las ventajas de Rocksmith 2014 tenemos una combinación ganadora.
También recuerda que el cable de Rocksmith te sirve como interfaz para Garageband u otros programas de simulación de amplificadores como Guitar Rig o Amplitube.
Sinceramente no habría progresado tanto hasta llegar a donde estoy ahora sin Rocksmith 2014
Valoración final de Rocksmith
Rocksmith no hace magia. No vas a saber tocar un instrumento sin constancia y dedicación. Pero, ¿A que no es lo mismo subir solo un puerto de montaña escarpado en bici que en un coche cómodo, con amigos y con buena música? Pues eso en definitiva es lo que es Rocksmith, un abanico de posibilidades que hacen que recorrer el camino sea tan divertido como llegar a la meta.
Mirando hacia atrás, no habría conseguido llegar a donde estoy ahora sin RS 2014 en este año. Simplemente porque buscar tiempo todos los días no es fácil, pero ver progresos prácticamente a diario y saber que te vas a divertir y aprender al mismo tiempo hace que quieras coger la guitarra todos los días. RS 2014 te da esa sensación de progreso y diversión. Si nunca has tocado una guitarra o un bajo te lo recomiendo. Y si ya sabes tocar (mucho o poco) también.
Más información | Ubisoft
En Applesfera | Rocksmith 2014, aprende a tocar la guitarra y el bajo en tu Mac: A Fondo
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