Pocas cosas dan más rabia cuando viajamos en avión que la aerolínea nos pierda la maleta. En ella va nuestra ropa y otras pertenencias que realmente necesitamos y que si se extravía puede fastidiarnos unas vacaciones. El usuario Elliot Sharod era consciente de ello, y por eso colocó un AirTag en cada una de sus tres maletas que la aerolínea irlandesa Aer Lingus perdió.
Localizar una maleta extraviada puede resolverse de dos formas: rápidamente arreglando lo que seguramente ha sido un lapsus. Se rellena un documento y no tardan en localizar la maleta extraviada por la bodega o algún almacén del aeropuerto. O metiendo todavía más la pata, perdiendo la maleta en un entramado de vuelos y localizaciones. Al ver que eso es lo que ocurría, Elliot procedió a exponer públicamente las rutas de la maleta facturada a la aerolínea marcadas con el AirTag. En un Powerpoint.
Cuando sabes donde está la maleta pero no puedes tenerla
Así ha sido el relato de este usuario que viajaba de regreso de su boda en Sudáfrica al Reino Unido. Conocido como 'AviosAdventurer', Elliot incluso publicó un vídeo explicando las diapositivas de ese Powerpoint en Twitter:
Ahí está toda la información. Sus tres maletas facturadas que debían volar de Johannesburgo a Abu Dhabi, de Abu Dabi a Frankfurt y de Frankfurt a Dublín. Pero lo que sucedió dista bastante de la realidad:
"Fue más por seguridad en el camino hacia abajo; el vestido de novia y el traje no estaban en nuestras maletas, pero fue por tranquilidad".
En resumidas cuentas, el usuario pudo recuperar dos de las tres maletas gracias a las reclamaciones y los datos de los AirTag. El servicio de mensajería, Eagle Aviation, se las entregó en su casa de Surrey. Sin embargo, vio como la tercera maleta llegaba a un domicilio de alguien desconocido en el centro de Londres. Paso a paso, diapositiva a diapositiva, Elliot alecciona a Aer Lingus acerca del punto exacto en el que se perdieron las maletas y la ruta que siguieron.
Un AirTag y una tercera maleta
La tercera maleta, que contenía recuerdos de boda, estaba en una dirección aleatoria en Pimlico. La batalla continuó durante varios días más y este viajero no dejó de avisar a la aerolínea cada vez que la maleta (y su AirTag) se movían:
Es más, también se grabó en vídeo aportando aún más documentos e informando de que el siguiente paso es considerar la maleta robada y que, por tanto, tendría que informar a la policía de Reino Unido.
Elliot comprobó que la maleta seguía sin moverse, pero no pudo recuperarla: "es la única manera en que puedo llamar su atención, nombrándolos y avergonzándolos".
Moraleja: gracias a los AirTag puedes monitorizar la ubicación de tu equipaje perdido mejor que la propia aerolínea, pero aún así no puedes hacer demasiado para poder recuperarla. De momento hay una denuncia interpuesta, así que quizás el embrollo se ha solucionado con las autoridades de por medio.
Lo que está claro es que las compañías aéreas podrían buscar modos de colaborar con los usuarios que hagan uso de los AirTag y otras balizas equivalentes. Nos ahorraríamos bastantes dolores de cabeza cuando viajemos este verano. Y hurtos, de paso.
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