Cuando imaginamos a Steve Jobs probablemente nos venga a la cabeza una imagen de él en algún escenario de keynote con un jersey negro, vaqueros azules y unas deportivas blancas. El motivo de ello es que durante más de media vida vistió igual, así que es normal que se nos haya grabado en la memoria su vestimenta. La cuestión es... ¿por qué lo hizo?
Definir el estilo de Steve Jobs es fácil. Vaqueros y jersey para ir cómodo todo el día y todos los días, además de deportivas. Pero se trata de un jersey negro, por lo que también era lo suficientemente formal como para poder atender reuniones (como por ejemplo esta) e incluso presentar nuevos productos en keynotes. El outfit de Steve Jobs se componía de lo siguiente:
- Jersey de cuello vuelto de color negro
- Vaqueros Levi's modelo 501
- Deportivas New Balance 992
Diseñado para los empleados de Apple, llevado únicamente por su CEO
La historia de cómo Steve Jobs decidió vestir siempre igual es de lo más curiosa. Está recogida en la biografía de Steve Jobs escrita por Walter Isaacson, la única autorizada por el propio cofundador de Apple. En el libro se cuentan diferentes anécdotas de su vida, como su forma de vestir.
Todo empezó con un viaje a Japón en el que Steve Jobs visitó las fábricas de Sony. Ahí se dio cuenta de que todos los empleados vestían igual, le preguntó al CEO de Sony el porqué de esto y tras entender las ventajas del uniforme en la empresa decidió aplicarlo también a Apple en California. Lo cierto es que la idea no llegó a buen puerto, así que Steve Jobs se vio con cientos de jerséis que nadie iba a llevar. Qué mejor que llevarlos él mismo para el resto de su vida.
"Durante un viaje a Japón a principios de la década de los ochenta, Jobs le preguntó a Akio Morita, el presidente de Sony, por qué todos los trabajadores de su empresa llevaban uniforme. «Pareció avergonzarse mucho y me contó que, después de la guerra, nadie tenía ropa, así que las empresas como Sony tenían que darles a sus trabajadores algo que ponerse cada día», recordaba Jobs. Con el paso de los años, los uniformes fueron teniendo un estilo propio, especialmente en compañías como Sony, y aquello se convirtió en una forma de crear un vínculo entre los trabajadores y la empresa. «Decidí que quería crear ese tipo de vínculo para Apple», recordaba Jobs".
"Sony, con su preocupación por el estilo, había contratado al célebre modisto Issey Miyake para que creara su uniforme. Era una chaqueta de nailon antirasgaduras, con las mangas unidas por una cremallera que podían retirarse para crear un chaleco. «Así pues, llamé a Issey Miyake y le pedí que diseñara un chaleco para Apple —recordaba Jobs—. Llegué con unas muestras y le dije a todo el mundo lo genial que sería llevar todos aquellos chalecos. Madre mía, ¡cuántos abucheos recibí! Todo el mundo detestó aquella idea»".
"En el proceso, no obstante, entabló amistad con Miyake, a quien visitaba con regularidad. También le gustó la idea de contar con un uniforme propio, tanto por la comodidad diaria (el argumento que él defendía), como por su capacidad para crear un estilo personal. «Le pedí a Issey que preparara algunas de las sudaderas de cuello vuelto que me gustaban, y me hizo como un centenar de ellas». Jobs advirtió mi sorpresa cuando me contó esta historia, así que me las enseñó, todas apiladas en el armario. «Esto es lo que llevo —afirmó—. Tengo suficientes para que me duren el resto de mi vida»".
Por qué vestir todos los días igual
Llevar siempre la misma ropa (diferentes prendas del mismo modelo, no todos los días la misma prenda) tiene todo el sentido del mundo. Es una cuestión de organización y de comodidad. Cuantas menos decisiones tenemos que tomar en nuestro día a día, más productivos somos. Llegar a la síntesis de lo esencial.
¿Decidir cada mañana qué ponerse? Eso no es "verdaderamente importante", es algo que se puede eliminar. Al menos para algunas personas. Tomar decisiones requiere de tiempo, si todos los días vas vestido igual,n este tiempo se puede dedicar a otras cosas.
Steve Jobs llegó a esta idea de la forma más curiosa, luego se dio cuenta de la utilidad que esto tenía en su día a día. El genio detrás de Apple vio que vestir siempre igual es más inteligente de lo que parece.
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