Cierto es que esta no es la primera vez que hablamos del rescate de un iPhone de algún cuerpo de agua. Hemos hablado de teléfonos recuperados de lagos, de canales y más. Lo que sorprende de este caso en particular es que el iPhone que se cayó en el río Leith llevaba más de un año sumergido cuando fue rescatado.
Resistencia al agua nivel leyenda
La resistencia al agua de los iPhone que todos tenemos en los bolsillos es algo que damos por hecho. Ciertamente no vamos a arriesgarnos a sumergirlos voluntariamente, pero sabemos que si algo pasara el iPhone saldría indemne. Lo que, sin duda, no debió imaginarse la propietaria del iPhone de esta historia es que su teléfono aguantaría sumergido más de un año en las aguas de un río escocés.
El submarinista Shane Stephen es ya todo un veterano en el campo de recuperar objetos perdidos del fondo del río Leith, que cruza la localidad escocesa de Edimburgo. Según recoge The Scotsman (vía AppleInsider), este hombre ha recuperado desde bicicletas de reparto de Just Eats hasta bolsos llenos de dinero.
En su última inmersión recuperó un iPhone, no se especifica el modelo más allá de mencionar que era una edición RED. Tras contactar con O2, la operadora británica, se pudo retornar el iPhone a la legítima propietaria que, para sorpresa de todos reveló que el iPhone se había caído hacía más de un año.
Un final feliz sorprendente para la mujer, que se une a muchas recuperaciones de teléfonos Apple que salen de entre las aguas sin apenas daños visibles. Toda una hazaña de la ingeniería para un dispositivo tan complejo. Un dispositivo que, como se dijo en la keynote de presentación de uno de ellos es “Oops resistant”.
Imagen | Imran Perwez
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