Tim Cook se levanta a las 3:45 de la mañana para empezar su día como CEO de Apple. Él mismo reconoce que ha perdido la cuenta hasta del número de cafés que toma al día. Y es que mantener la disciplina no se trata de estar rodeado de restricciones, se trata de crear orden. Las personas altamente disciplinadas han dominado este arte. Tienen rutinas que siguen religiosamente, especialmente en las primeras horas del día. Según la psicología, hay nueve actos específicos que estas personas tienden a hacer antes de las ocho de la mañana. Y lo mejor es que cualquiera puede adoptarlos.
Se levantan muy pronto (pero no necesariamente a las cuatro)
La psicología sugiere que las horas tranquilas de la mañana pueden ser una mina de oro para la productividad. Las personas disciplinadas son muy conscientes de esto. Valoran la tranquilidad y la orientación que proporcionan las primeras horas. Mientras la mayoría de las personas siguen durmiendo, aprovechan este tiempo para realizar tareas sin interrupciones, marcando el tono para el resto de su día.
Pero no se trata solo de ser madrugador por serlo. Se trata de tener un comienzo del día con propósito y tomar el control de tus rutinas matutinas. Por ejemplo, Tim Cook se levanta a las 3:45 para revisar cientos de emails antes siquiera de que las luces del Apple Park se enciendan.
Hacen ejercicio
El ejercicio es un denominador común entre las personas altamente disciplinadas. No se trata solo de salud física, sino también de bienestar mental y claridad. Tim Cook también pone esto en práctica: sobre las cinco de la mañana está en el gimnasio para aprovechar esa energía después de haber dormido. Comenzar el día con un entrenamiento (ya sea de fuerza, cardio o incluso una sesión rápida de yoga) prepara el cuerpo para el resto del día y despeja la mente. Mens sana in corpore sano, ¿verdad?
Se hidratan
La hidratación juega un papel crucial en cómo funciona nuestro cuerpo. El agua activa nuestro metabolismo y ayuda a eliminar toxinas. Mientras Tim Cook probablemente esté en su segunda botella de agua cuando el sol sale, las personas disciplinadas entienden que lo importante es la constancia, no la hora. Según la ciencia, una ingesta adecuada de líquidos diaria es de aproximadamente 2,5 litros para hombres y 2 litros para mujeres. Aparte pueden ir todas las bebidas y alimentos. Comenzar el día con uno o dos vasos de agua es una excelente manera de empezar a cumplir con esta necesidad diaria.
Aplicaciones como Water Tracker nos ayudan a saber cuánta agua bebemos a lo largo del día
Planifican su día
Una cosa que las personas altamente disciplinadas hacen consistentemente es planificar su día. Entienden que la buena organización es clave para alcanzar sus objetivos. En lugar de lanzarse de cabeza al día, toman un momento por la mañana para esbozar lo que se quiere lograr. Puede ser tan simple como escribir una lista de tareas o tan detallado como programar cada hora del día. Efectivamente, ya te estás imaginando a Tim Cook con su iPad y Apple Pencil tomando notas para preparar todos los desafíos del día.
Revisar el calendario o la agenda del día puede marcar la diferencia entre ir bien o mal de tiempo
Desayunan saludablemente
Un desayuno nutritivo es otro hábito común entre las personas altamente disciplinadas. Entienden que la primera comida del día juega un papel vital en establecer el tono para sus niveles de energía y concentración. En lugar de saltarse el desayuno o agarrar un donut sobre la marcha, eligen opciones ricas en proteínas, fibra y grasas saludables. Puede ser un tazón de avena con frutas y frutos secos, o guacamole con tostadas integrales.
Practican la gratitud
La gratitud no es solo una palabra de moda. Es un hábito poderoso que puede cambiar tu mentalidad y actitud hacia el día que tienes por delante. De hecho, la ciencia la relaciona directamente con la felicidad. Y en Apple hace años se implantó la regla de los tres metros para fomentarla. Las personas disciplinadas a menudo toman unos momentos cada mañana para reflexionar sobre lo que agradecen. Esto establece un tono positivo para su día, permitiéndoles abordar los desafíos con una perspectiva más optimista.
Evitan las distracciones digitales
Vivimos en una era donde nuestros smartphones son a menudo lo primero que tocamos por la mañana. Pero las personas disciplinadas resisten este impulso. He aprendido esto por las malas. Solía comenzar mi día desplazándome por las redes sociales o revisando correos electrónicos. Se sentía como si estuviera siendo productivo, pero en realidad era solo un vórtice de distracción. Es difícil, pero lo mejor es dejar el iPhone de lado al menos durante la primera hora. Así podrás ponerte en marcha y pensar todo como es debido (además de ir más rápido por casa).
Más adelante sí que puedes centrarte en todo el mundo digital. Al fin y al cabo, es el trabajo de muchas personas. Por ejemplo, Tim Cook revisa entre 700 y 800 emails antes del amanecer. Eso sí, se apoya en la inteligencia artificial para poder atender a todos como es debido.
Practican mindfulness
El mindfulness es otra práctica común entre las personas disciplinadas. A lo largo de la mañana dedican unos momentos a la respiración profunda o simplemente a sentarse tranquilamente con una taza de café. La clave es tomar este tiempo para estar presente y establecer un tono tranquilo y enfocado para el día. El Apple Watch nos recuerda cuándo respirar para dejar la mente en blanco durante ese minuto. Puede parecer que no sirve para nada, pero de cara a la productividad se nota.
Aplicación Mindfulness en el Apple Watch
Dan los pasos hacia sus objetivos
Por encima de todo, las personas altamente disciplinadas usan sus horas matutinas para dar pasos hacia sus objetivos. No solo sueñan con el éxito, trabajan por él. Te suena la frase "es que no tengo tiempo". Hay tiempo, lo único que hay que buscarlo. Madrugar un poco puede marcar la diferencia para empezar el día bien y terminarlo aún mejor. Llegar a casa y poder descansar tranquilamente con la satisfacción de haber llegado a todo. Y sí, si te levantas una o dos horas antes también deberás irte a dormir una o dos horas antes. Pero serán mucho más productivas esas dos primeras horas del día que las dos últimas de la noche. ¿Mejor planificar el trabajo o terminar viendo un capítulo en la tele? Tiene que haber tiempo para todo, desde luego. Pero si tienes un objetivo en mente, quizás sea momento de invertir la rueda.
Ya sea trabajando en un proyecto personal, aprendiendo una nueva habilidad o simplemente leyendo un libro que amplíe sus conocimientos, dedican tiempo cada mañana a actividades que los acerquen a sus sueños. No hace falta copiar exactamente la rutina de Tim Cook. Se trata de encontrar tu propio ritmo y mantener una disciplina que funcione para ti. Cada viaje comienza con un solo paso. Y para las personas altamente disciplinadas, ese primer paso a menudo ocurre antes de las ocho de la mañana.
Fuente | Geediting
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