Almacenar archivos en la nube suele ser una buena forma de poner a buen recaudo nuestros archivos más importantes, aunque eso no quita que una brecha de seguridad o fallo en los servidores acabe borrándolos. De ahí que haya quien prefiera un formato físico y ahora celebre la creación del pendrive (casi) definitivo por sus características indestructibles.
Como diría el mecánico de un coche cuando esperas semanas para la reparación del automóvil, esta pieza viene de Alemania. Más en concreto de la compañía especializada Machdyne, quienes comercializan ese lápiz de memoria a muy buen precio para sus características. El problema es que apenas cabe un archivo y de pequeño tamaño. Y de ahí el "casi" al referirnos a este pendrive.
Así es el pendrive indestructible y que ya se vende
Blaustahl Storage Device es como se llama este curioso lápiz de memoria que, lejos de ser un proyecto en desarrollo, existe ya y se puede comprar por apenas 30 euros. O para ser exactos, 29,95 euros, que es lo que cuesta en la web de Machdyne.
Diseñado en Alemania y fabricado en China, aparentemente no parece diferenciarse mucho de cualquier otro lápiz de memoria USB-A como los que podemos encontrar en cualquier tienda de electrónica. La particularidad es su alta resistencia para durar más de 200 años. O eso al menos dicen sus fabricantes.
Durante ese tiempo es capaz de soportar temperaturas de hasta 35ºC. Y durante casi un siglo podría soportar los 55ºC sin perder sus datos. Nada mal si lo que buscamos es una memoria externa que sea duradera. Y más comparado con otros pendrives cuya resistencia es menor y tienen una vida útil de no más de 20 años.
La principal capacidad de un pendrive estándar es la debilidad en este
¿Para que suele querer la gente un pendrive? Para almacenar archivos. Pues bien, este que vende Machdyne podrá ser muy resistente a las temperaturas y al paso del tiempo, pero no cumple mucho con esa esperable función de almacenar archivos. O no al menos en la cantidad que nos gustaría.
Interior y exterior del pendrive de Machdyne
En su interior apenas se puede almacenar 8 KB de datos. Y no, no has leído mal, porque hemos escrito KB (kilobyte) y no GB (gigabyte). Tiene menos capacidad incluso que el primer ordenador de Apple, el Apple I de 1976 y que almacenaba 256 KB. Daba para bastante más.
Y es que, para hacerte a una idea real de qué se puede almacenar realmente en un pendrive de 8 KB no hay más que leer la propia descripción de producto. En ella se habla de un documento de cuatro páginas de texto (y solamente texto) de 8.000 caracteres.
Por tanto, la función real de este pendrive se limita a ser una buena cápsula del tiempo en la que almacenar lo justo. Lo que sería un simple documento de Word o Pages con algún texto que quieras dejar para la historia. Y poco más. O, mejor dicho, para nada más.
Vía | Xataka México
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