Qué significan los colores de los cables USB en los distintos dispositivos Apple

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Si te fijas en la terminación de algunos cables USB verás que el puerto suele estar coloreado de algún tono específico: azul, naranja, negro e incluso blanco. Estos colores no responden a cuestiones estéticas, sino que están íntimamente relacionados con las capacidades de cada cable y cada HUB. 

Por ejemplo, un cable USB-C con una conexión en color naranja nos dice que forma parte de la generación 3.2 y que ofrece una tasa de velocidad teórica de hasta 2,5 GB por segundo. Por esto mismo es tan importante conocer sus diferencias, para aprovechar al máximo las posibilidades. 

La clasificación de cada tipo de USB según su color

Hal Gatewood Qm9yzaox Gq Unsplash

Así es: cada color de cada puerto USB corresponde a una designación. Y cada nueva generación suele ser compatible con las anteriores. Por ejemplo, USB 4.0 es retrocompatible con los estándares anteriores (USB 3.2, USB 3.0 y USB 2.0) y alcanza una velocidad análoga a Thunderbolt 4.

Por desgracia, con la nueva generación la confusión reina, porque todos los USB-C y conectores Thunderbolt 3 y 4 parecen iguales, salvo por el icono del rayo de estos segundos. Y más a partir de ahora, sabiendo que Apple está obligada a usar la conexión USB-C en sus futuros iPhones.

Pero ese es otro debate que traerá importantes ventajas ecológicas y algún que otro disgusto. Dicho esto, así queda la clasificación de colores:

  • Puerto USB es de color blanco. Este tipo de conexión es la más antigua, la que corresponde con el estándar USB 1.0. Solo transfiere datos a una velocidad pico de hasta 1,5 Mbit/s (188 kB/s).
  • Puerto USB es de color gris. Esta es la primera evolución, corresponde a la generación USB 1.1, de velocidad completa. Permite una velocidad de hasta 12 Mbit/s (1,5 MB/s)
  • Puerto USB es de color negro. Saltamos al USB 2.0. Permite transferir datos a 480Mbps/60MB/s o cargar dispositivos a una potencia de 2,5W (5V y 500mA). Si tienes cables de hace una década, probablemente sean de esta categoría.
  • Puerto USB es de color azul oscuro. La llegada de nuevas conexiones y discos duros más rápidos también aterrizó a nuestros hogares este nuevo estándar diseñado para alcanzar una velocidad de transferencia (teórica) de 5Gbps y una potencia de carga energética de 4,5W (5V y 900mA). No en vano se denomina USB 3.0.
  • Puerto USB es de azul claro: USB 3.1, más inusual, esta evolución garantiza más velocidad con un menor gasto eléctrico. Hasta 10Gbps (1,25 GB/s), nada menos. Además de su ancho de banda, brinda una gran compatibilidad, ya que permite alimentar aparatos con hasta 100W.
  • Puerto USB es de color naranja: este es el estándar más común en la actualidad, asociado a muchos cargadores de carga rápida. Implica un salto equitativo, ya que corresponde a USB 3.2 e implica tasas de trasferencia de hasta 20 Gbit/s (2,5 GB/s).
  • Puerto USB es de color rojo: USB 4.0, evolución sobre el anterior, compatible con USB Power Delivery y hasta 100W de potencia.
  • Puerto USB es de color amarillo: no se trata de un estándar sino de un tipo de cable de alimentación continua, que informa que realiza carga permanente, indistintamente de si se trata de un cable USB 2.0 o USB 3.0.

Por qué hay cables USB de diferentes colores

La razón es evidente: diferenciar los distintos tipos de puertos y cables USB, diferenciando la velocidad de transferencia y de voltaje compatible. Pero incluso con estos códigos de color, muchos fabricantes implementan rótulos e iconos que explicitan la generación del cable —con nomenclaturas como SSD-cable—, además del puerto que estés usando en tu dispositivo Apple.

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