Que Apple Pay es muy seguro ya lo sabemos. Que Apple Pay es más seguro que pagar con una tarjeta física es algo que muchos sabemos, pero quizá no todos los usuarios del servicio. Informar de ello es el objetivo de la nueva campaña publicitaria ultrarápida que Apple ha lanzado.
La seguridad de Apple Pay en tres simples ejemplos
La campaña se apoya en tres vídeos de 15 segundos que nos cuentan tres consideraciones muy importantes a tener en cuenta a la hora de evaluar la seguridad del sistema de pago que podemos disfrutar en nuestros iPhone o Apple Watch. En el primer vídeo, el que precede a este párrafo, Apple nos expone que mientras las tarjetas pueden robarse y ser usadas por cualquiera (hasta cierta cantidad que luego requiere código), Apple Pay solo lo podemos usar nosotros, por lo que nuestro dinero está a salvo.
En el segundo vídeo, arriba de estas líneas, Apple nos recuerda que las tarjetas pueden ser escaneadas en cualquier momento, mientras que Apple Pay solo está activo cuando debe estarlo. Una activación que, además, depende de que el sistema nos reconozca mediante Face ID. Todo ello reduce drásticamente las posibilidades de que nadie escanee la tarjeta sin nuestro conocimiento.
En el último vídeo Apple nos recuerda que mientras al pagar con tarjeta estamos dando la numeración real de la misma, al hacerlo con Apple Pay se da una numeración alternativa. Es decir, no se comunican los datos de nuestra tarjeta, sino unos acompañados de un código de seguridad dinámico generado para cada transacción que, una vez procesado el pago, se desechan y pierden validez. Una medida muy interesante para proteger nuestra tarjeta.
Con todo, está claro que, mientras llega Apple Pay Later, Apple Pay es la mejor forma de pagar. La comodidad de acercar nuestro iPhone o Apple Watch al terminal unidas a la gran seguridad del sistema destacan por encima de otras alternativas. Un doble toque en el botón lateral y… listo.
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