Ayer se filtraron los primeros benchmarks del MacBook Pro M2, que dejan entrever la mejora de rendimiento de casi un 20% respecto al chip M1. Pero hay otro detalle, simple pero aplastante, que demuestra la diferencia abismal de eficiencia que hay entre los chip Intel de alto rendimiento y esos nuevos M2: rinden más que un Mac Pro.
El fin del camino para Intel en Apple es cada vez más evidente
En datos más concretos, el chip M2 en el MacBook Pro de 13 pulgadas (o sea, en toda su potencia gracias a los ventiladores de ese portátil) es más potente que el Mac Pro de entrada con el Intel Xeon W de 8 núcleos. Un portátil de 1.619 euros versus un ordenador de sobremesa profesional de 6.499 euros.
El benchmark multi-core en el MacBook Pro da un resultado de 8.929 puntos, mientras que el Mac Pro de entrada da 8.027 puntos en ese mismo test. De acuerdo, el Mac Pro puede llegar a ser mucho más potente si le añadimos el Intel Xeon W de 28 núcleos (20.029 puntos), pero es todo un hito que un chip de portátil supere la gama de entrada de ese sobremesa. Demuestra la diferencia de evolución entre las arquitecturas y la razón por la que Apple decidió hacer el cambio.
De hecho ya quedó demostrado que si quieres el Mac más potente ya no debes mirar al Mac Pro si no al Mac Studio. Su chip M1 Ultra saca 23.366 en la misma prueba multi-core, poniéndose por encima de cualquier otro Mac. O dicho de otro modo, el Mac Pro necesita abandonar Intel cuanto antes para conservar su prestigio. Veamos qué es lo que nos depara este otoño.
Imagen | Andras Vas
Ver 31 comentarios