¿Puede un iPhone puesto a la venta el 24 de septiembre de 2021 superar en rendimiento a otro que acaba de salir a la venta como es el nuevo Samsung Galaxy S23 Ultra? Así parece ser, según los distintos tests de rendimiento llevados a cabo con Geekbench 5.
Cuando se trata de potencia, pocos smartphones pueden plantarle cara al iPhone y sus SoC de 64bits. El A15 del iPhone 13, con sus dos núcleos Avalanche a 3,24 GHz y sus cuatro cores Blizzard de bajo consumo, sigue demostrando sus capacidades frente al último chip de Qualcomm, el Snapdragon 8 Gen 2.
Un iPhone 13 que todavía presume de potencia
Ni siquiera hace falta echar un ojo al iPhone 14 Pro Max para contrastar la diferencia de potencia. Según la web CompareDial y basándose en los datos filtrados por Geekbench 5, el nuevo Samsung Galaxy S23 Ultra, que ya ha podido ser analizado y testeado por decenas de medios, se queda corto en su benckmark y alcanza los 1480 puntos en un solo núcleo y 4584 puntos en multinúcleo.
Si comparamos los resultados con los terminales de Apple, el iPhone 13 le adelanta en single core con 1698 puntos y queda casi a la par en multinúcleo, con 4513. El iPhone 13 mini también se le adelanta y directamente el iPhone 13 Pro vapulea los números conseguidos por el nuevo buque insignia de Samsung, con 4669 puntos.
Queda demostrado que el chipset A15 Bionic supera lo logrado por la CPU del Qualcomm Snapdragon 8 Gen 2, lo que también redunda, en términos teóricos, en una mejor gestión energética en tareas que no requieran carga multinúcleo. Samsung ha apostado por sustituir el chip Exynos por una CPU capaz de alcanzar una velocidad de reloj a 3,36 GHz. Sigue sin ser suficiente.
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