Descanse en paz el Apple Car. O más bien su proyecto, dado que nunca obtuvo una denominación oficial y ni tan siquiera fue anunciado por Apple, aunque durante años hemos asistido a rumores hasta que esta misma semana ha trascendido la cancelación de su desarrollo. Algo que, aunque ya daba pistas de estar en tela de juicio, ha resultado un tanto inesperado.
No obstante, el Apple Car no es el primer producto de Apple que acaba cancelado antes de salir al mercado. No sabemos si será el último, pero en el historial de filtraciones de la compañía aparecen unos cuantos dispositivos muy interesantes sobre el papel, pero que por una causa u otra nunca llegaron a salir. Habrá algunos que ni siquiera trascendieran, por lo que lógicamente nos centraremos en los que sí llegaron a filtrarse e incluso presentarse, aunque no es el caso del Apple Car.
AirPower, el cargador múltiple que se anunció con el iPhone X
Sin seguir un orden estrictamente cronológico, hablar de un producto de Apple cancelado es hablar de la AirPower, protagonista en estos últimos años de numerosos memes en redes sociales y foros dedicados a entusiastas de Apple.
La AirPower no sólo existió, sino que se presentó. No fue un producto presentado al dedillo o del que Apple presumiera largo y tendido en una nota de prensa, pero sí se llegó a anunciar en septiembre de 2017. Fue en la presentación del ya icónico iPhone X, el cual junto a los iPhone 8 fue el primero de Apple en incorporar carga inalámbrica.
¿Qué había de malo en presentar un accesorio propio para la carga inalámbrica de los primeros iPhone con esta capacidad? Pues todo y nada a la vez. La idea era que pudiese servir para cargar hasta tres dispositivos a la vez. En algunas de las imágenes se aprecian un iPhone, un Apple Watch y unos AirPods. ¡Hasta tenían animaciones en iOS cuando se conectaba a la AirPower?
La parte mala y que a la postre fue definitiva es que en aquel momento la AirPower no había cumplido aún los estándares de calidad esperados. No trascendió aquello al momento, ya que la idea de Apple era lanzarlo a finales de 2017. Luego fue a finales de 2018. Luego nada… Se iba alargando y alargando la espera para tener disponible este cargador múltiple.
Por el camino se iba filtrando que Apple tenía auténticos dolores de cabeza con el AirPower. Su complejo mecanismo de bobinas interno alcanzaba temperaturas indeseables que podían poner no sólo en peligro el cargador en sí y a los dispositivos conectados, sino también al propio usuario. Y eso, teniendo además el caso del Samsung Galaxy Note 7 tan reciente, no era algo con lo que a la compañía le apeteciese arriesgar.
Así las cosas, hace ahora casi cinco años (a finales de marzo de 2019), se cancelaba oficialmente la AirPower. El entonces vicepresidente de hardware de Apple, Dan Riccio, emitía unas declaraciones a TechCrounch confirmando que finalmente no habían podido alcanzar los estándares de calidad.
Desde aquella cancelación han ido surgiendo algunos mínimos rumores de una continuación del desarrollo del AirPower, pero sin pruebas refutables que lo acrediten. También surgieron, tanto antes como después de la cancelación, accesorios de otros fabricantes intentando imitar la idea. Y sí, hay cargadores múltiples, pero no con ese diseño de alfombra lisa en la que poner tres dispositivos en cualquier posición. Una prueba de que realmente la idea era buena, pero la ejecución es cuando menos complicada.
El Apple Newton se llegó a lanzar, pero es casi como si nunca hubiese salido
Un mal recuerdo es como podría haber definido Michael Spindler al Apple Newton. El ya fallecido dirigente fue CEO de Apple entre 1993 y 1996, siendo esta trayectoria marcada por éxitos como la arquitectura Power PC, pero también por grandes fracasos como la PDA.
Este es un caso particular en esta lista, puesto que sí llegó a lanzarse, pero pocos se acuerdan de él. Y quien se acuerda es porque acabó trascendiendo a la historia como uno de los grandes fracasos de Apple. Y eso que, como la AirPower, su idea no estaba mal planteada.
Con una asociación con Motorola para buena parte del hardware, la Netwton era una de las primeras PDA, un tipo de dispositivos que ya empezaba a popularizarse en los 90. Su desarrolló sin embargo comenzó en 1987, con la idea de dar con un producto revolucionario que diese optimismo a una Apple que ya empezaba sus horas bajas tras varios vaivenes en la cúpula directiva.
¿Qué era capaz de hacer el Apple Newton? Pues sobre el papel hacía todo lo que se esperaba de una PDA en aquellos años, desde la gestión de la agenda personal hasta poder escribir correos electrónicos. Cuando salió a la venta en 1993 se demostraron sus dos grandes problemas.
Porque como imaginarás, el Apple Newton no era perfecto. La potencia y el precio eran dos grandes handicaps. Sus funcionalidades hoy día son tan básicas que cualquier móvil barato es capaz de ejecutar, pero en la época se necesitaba de un hardware muy avanzado que el procesador ARM RISC 610 no era capaz de ejecutar con la suficiente solvencia. Que saliese a 700 dólares lo hacía aún más inasumible.
Y es que, con inflación mediante, equivaldría a unos 1.500 dólares hoy día. No es que sea un precio desproporcionado si hablamos de dispositivos móviles de Apple en 2024, pero claro, la circunstancia del Newton a principios de los 90 era muy diferente. Un iPhone 15 Pro Max ronda esos precios, pero a la vez entrega un hardware potente en un sistema operativo más que asentado, tras varias generaciones predecesoras y colocándose como uno de los mejores móviles del mercado. El Apple Newton no tenía nada de eso.
Es precisamente el iPhone el que, veinte años después de que se iniciase el desarrollo del Newton, acabó siendo un producto revolucionario y que hoy día supone la mayor fuente de ingresos de Apple. El Newton en cambio no llegó a hacerse un hueco en el mercado pese a mantenerse allí un lustro.
En 1998, ya con Steve Jobs de nuevo al mando de la compañía, el Apple Newton no sólo quedaría descatalogado, sino que también se pausó su desarrollo. Tenían otras ideas en mente como las del ya citado iPhone y no querían nada relacionado con aquel fracaso. Tanto es así que en 2013 decidieron renunciar a la marca 'Newton'.
Apple Car, el último ejemplo de un proyecto titánico que acaba en papel mojado
No, no es casual hablar de titanes cuando mencionamos el coche de Apple. En estos últimos años trascendió el nombre interno con el que Apple citaba este desarrollo, apodándolo "Proyecto Titán". Como decíamos ya en la introducción, ningún miembro de Apple llegó jamás a hablar públicamente de ello a diferencia de la AirPower. Sin embargo, varios filtradores reputados y fuentes cercanas a la compañía llevan más de una década asegurándolo.
Como sucedió con el Apple Vision Pro y confirman las patentes de 2008 y hasta el mismísimo Tim Cook, era un proyecto a largo plazo. Con el coche, sucedió algo similar. Alrededor de 2014 empezó a fraguarse la idea de lanzar un coche de conducción autónoma bajo el paraguas de la marca de Apple. Un equipo secreto de ingenieros estuvo años preparando todo lo relativo al mismo, con especial enfásis en las pruebas de conducción autónoma.
Sin embargo, Apple no podía caminar sola en semejante proyecto, dado que requería tener a un fabricante con experiencia al que asociarse. De los muchos que sonaron, Hyundai es el que estuvo más cerca. Es más, portavoces del fabricante coreano llegaron a confirmar las negociaciones con Apple. Sin embargo, parece que no pasaron de la fase inicial de la conversación y quedó en agua de borrajas.
El pasado mes de enero llegó la antesala de una no tan previsible cancelación, cuando Bloomberg reveló un cambio de planes con respecto al proyecto. El retraso en el desarrollo de un coche totalmente autónomo provocó, según el citado medio, presión por parte de los accionistas hasta el punto de decidir rebajar las pretensiones y optar por un vehículo con una conducción de nivel 2, es decir, con soporte de dirección, aceleración y freno, así como funciones de control de crucero adaptativo, pero sin llegar a tener funciones autónomas en ninguna circunstancia.
El motivo de ese posible enfado por parte de los accionistas derivaba ni más ni menos que en los cientos de millones de dólares invertidos en el proyecto sin llegar a ver de forma clara una vía por la que seguir. Y es que el desarrollo, aunque secreto, estaba siendo caro. Desde los sueldos de los trabajadores hasta los sistemas, ordenadores y otros elementos logísticos relacionados con las pruebas de conducción autónoma.
Así las cosas, si nos hubiesen preguntado el lunes, diríamos que el Apple Car se lanzaría, como mínimo, en 2028, que su precio rondaría los 100.000 dólares y que sería un coche eléctrico "normal" en tanto en cuanto seguiría requiriendo de la actuación del conductor. Ya desde el martes a media tarde (hora española), la cosa cambió por completo. El proyecto se ha cancelado definitivamente. O eso dicen también en Bloomberg, fuente que insistimos en que ha sido fiable en todo lo relativo a Apple en general y a este Titan Project en particular.
El iPhone también ha sido víctima de cancelaciones y cambios de ideas
Aparte de esos tres grandes proyectos que supusieron una cancelación sonada, en estos últimos años e incluso meses hemos ido asistiendo a rumores que, con mayor o menor fiabilidad, han aportado datos sobre el pasado y futuro del iPhone.
- iPhone plegable: que haya móviles plegables ya no es sorpresa con varias marcas lanzando cada año versiones 'flip' y versiones 'fold' (con Samsung a la cabeza). Que Apple como una de las reinas del mercado no haya lanzado nada es algo que tiene diferentes interpretaciones, aunque son muchísimos los rumores al respecto. Sin embargo, hace sólo una semana trascendían detalles de una posible cancelación del iPhone plegable. Al igual que no hay certezas contundentes de su desarrollo, tampoco de su cancelación. Sí hay sin embargo patentes que hablaban hasta de un iPhone enrollable que podrían quedar en papel mojado.
- El iPhone con teclado físico: no es que se haya conocido ahora, pero esta semana hemos recordado un correo filtrado de Steve Jobs hablando sobre un móvil con teclado inspirado en uno que Samsung lanzó al mercado en 2005. Y no fue el primero, pero ahí faltaba apenas año y medio para que se lanzase el iPhone original tal y como lo conocimos, pero aquella prueba demuestra que su idea de diseño no fue siempre la misma y que el devenir del smartphone de Apple podría haber sido muy distinto si el primero hubiese llevado un teclado que tanto parecía odiar Jobs. No sabemos si mejor o peor, pero diferente hubiese sido.
Imagen de portada | Álvaro García M. con DALL-E 3
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