El gobierno británico no se anda con medias tintas a la hora de proteger el contenido de sus reuniones de gabinete y en este sentido, la Primera Ministra Theresa May ha ordenado que los asistentes a las mismas se quiten los Apple Watch según detalla el Telegraph antes de acceder a la sala.
Según parece, esto no sucedía en la etapa de David Cameron que no tenía inconveniente en que sus ministros acudieran a las reuniones de alto nivel con el smartwatch en sus muñecas. Según este medio, se teme que los rusos hackeen estos dispositivos dispositivos para estar informados del contenido de las mismas.
En realidad se trata de la misma prohibición que afectaba ya a la entrada de móviles en la sala, que ahora se ha hecho extensiva al Apple Watch (aunque como bien indica 9to5Mac y pese a que el diario mencione únicamente al reloj de los de Cupertino, seguramente será aplicable a cualquier smartwatch).
Vía | 9to5Mac
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