Mis estudios y mi trabajo hacen que tenga que pasar, inevitablemente, muchas horas al día delante de un ordenador. Las consecuencias de esto son muchas y pueden estar relacionadas con la espalda, las piernas o el exeso de vida sedentaria. Hay muchas soluciones para minimizar estas consecuencias, pero la solución que os presentamos hoy tiene forma de aplicación.
Y es que una de las consecuencias de pasar muchas horas trabajando con un ordenador es el deterioro de nuestros ojos, que sufren con el monitor o monitores. Algunas aplicaciones como Brightness Control, que ya os comentamos en el pasado, ayudan reduciendo el brillo del monitor, pero con esto no parece ser suficiente. Es aquí cuando interviene Flux.
Flux no reduce el brillo de la pantalla de nuestros Macs, en vez de eso regula la temperatura de color de nuestro monitor hacia unos tonos que están más acorde con la iluminación de la sala en la que nos encontremos. Nada mejor que una imagen para ilustrarlo:
En este escritorio podemos ver un MacBook Air conectado a un monitor externo. La pantalla del MacBook Air tiene F.lux activado, pero el monitor externo no, y su brillo es muy elevado en comparación con el resto del ambiente de la habitación. Sin embargo, si activamos F.lux en el monitor externo…
...conseguimos que el brillo del monitor se adecue con el resto del ambiente y tenemos un espacio de trabajo más cómodo. Personalmente lo he estado usando desde varios días (activándolo una vez cae la noche) y el cambio que he notado ha sido notable. Al principio encontraba los tonos anaranjados algo exagerados para trabajar, pero los ojos no terminan tan cansados como solían terminar normalmente.
Por supuesto, este programa no es adecuado en el caso de que se esté trabajando en tareas de diseño o fotografía en la que ver el color correcto es importante, pero con usos más normales el cambio se agradece. Lo mejor de todo es que F.lux es completamente gratuito y ocupa poco espacio, situándose como un icono en la barra de tareas.
Sitio oficial | F.lux
Imágenes | Flickr de Deadsunrise (1,2), con el permiso de reproducción.
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