Un inversor activista de Intel ha enviado una carta a la compañía pidiéndole explorar "alternativas estratégicas" importantes, según recogen en Reuters. En la misiva se muestra la preocupación de este fondo de inversión ante la posición de la compañía con sede en Santa Clara, California. Y también por las amenazas que suponen AMD y TSMC, así como el abandono de clientes importantes como Apple, Microsoft y Amazon.
Cuatro grandes problemas para Intel
Third Point LLC es un fondo de inversión con sede en Nueva York que cuenta con alrededor de 1.000 millones de dólares invertidos en Intel. Intel Corporation tiene una capitalización bursátil de unos 200.000 millones de dólares, por lo que este inversor tiene un 0,5% del total. Aún y todo, puede ser suficiente para movilizar a otros inversores y forzar cambios en el fabricante de chips.
Para Third Point, existen cuatro grandes problemas en Intel que quieren ver solucionados:
- Intel debe hacer frente al problema de capital humano, dado que muchos de sus diseñadores de chips han abandonado la compañía, "desmoralizados por el status quo".
- Intel ha perdido su liderazgo en la fabricación de microprocesadores frente a TSMC y Samsung.
- Intel también ha perdido cuota de mercado en mercados clave como el PC y los data centers.
- Intel se encuentra ausente de mercados como el de aplicación de inteligencia artificial en el que NVIDIA está inmerso.
Sin un cambio inmediato en Intel, tememos que el acceso de EEUU al suministro de semiconductores de tecnología punta se erosione, forzando a EEUU a apoyarse en una región asiática inestable para abastecer tanto a PCs como centros de datos o infraestructura crítica.
Este fondo de inversión lo tiene claro: Intel debe tomar el timón de un barco que ahora está a la deriva, antes de que se estrelle contra las rocas. Para ello, tiene algunas ideas que también expuso en su carta.
"Alternativas estratégicas" para enderezar el rumbo de Intel
Para Third Point, Intel ha desperdiciado demasiadas oportunidades. La pandemia ha beneficiado a la venta de PCs debido al teletrabajo, pero Intel no ha sabido aprovechar el empujón que también han experimentado otros segmentos. Uno de los culpables identificados es la incapacidad de poder hacer frente a las demandas de customización que requieren muchos clientes en sus chips.
Por ello, Third Point apunta hacia la externalización de la fabricación de procesadores. Hasta ahora, Intel ha diseñado y fabricado sus propios chips, dándole una ventaja competitiva sobre la industria durante décadas. Bajo este esquema se forjó la alianza con Microsoft, conocida como "Wintel", que ha reinado durante muchos años. Hasta que llegó el iPhone.
Gracias al terminal de Apple, se ha iniciado una nueva era en el que los procesadores de móviles se construyen justo al contrario que hace Intel. Si el gigante de silicio los diseña y fabrica él mismo, los chips móviles se diseñan por una empresa y se fabrican por otra. Así es como Apple ha podido centrarse en crear el mejor equipo de ingenieros de chips del mundo, externalizando la fabricación a compañías como TSMC o Samsung.
Ese es precisamente el camino que quieren ver en Third Point. O, al menos, que se explore esta posibilidad. Porque tras los continuos tropiezos de Intel en la fabricación de chips de 10nm ha demostrado que hay algo que no funciona ya en su modelo.
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