La severidad con la que se juzga a Apple es brutal. Analistas, prensa, blogs y usuarios minimizamos sus éxitos y exageramos sus fracasos. Es así y no es injusto. Apple se lo ha ganado a pulso cuando lo hacía bien y debe aguantarse cuando le vienen mal dadas. Uno no se sube a un pedestal sólo a que le digan bonito. De repente, estás llamando la atención de millones de personas y no les vas a caer bien a todas ellas. Pretenderlo es un esfuerzo inútil.
La semana pasada hablamos de cómo Apple no aspira a ser una compañía universal ni para todos los públicos. Al contrario que Google, cuyo objetivo es poner una pantalla delante de todo el mundo para colocar publicidad (hace negocio a posteriori), el negocio de Apple es vender un producto y debe ganar dinero con cada venta desde el principio (hace negocio a priori). Entender que Apple no puede ni quiere servir a todo el mundo es de vital importancia para comprender su funcionamiento, estrategia y negocio.
Apple vende hardware con software y servicios atractivos para aumentar su valor. Pretender que cambie su forma de ganar dinero sustituyendo márgenes de venta por prestaciones de servicios à la Google es como pedirle a una fuente de agua que nos dé naranjada. Habría que cambiar todo lo que hay detrás de la fuente para conseguir el resultado deseado y no veo a Apple con la intención de hacerlo.
Dicho esto, hoy veremos para qué fue diseñado el iPhone 5c, si ha cumplido su objetivo o ha fracasado y cómo se comparan sus ventas con las del resto de teléfonos del mercado.
¿Quién eres, iPhone 5c?
El iPhone 5c no ha sido, no es, ni será el iPhone barato que muchos deseaban. Un iPhone low cost que rompiese el mercado. Por mucho que lo deseásemos, Apple jamás nos dijo que fuera a ser así y lo dejó claro el día de la presentación. Por muy preocupados que estuvieran algunos de los dirigentes de Apple en que el crecimiento del mercado de smartphones se estuviera concentrando en dispositivos que ellos no ofrecen.
Con el paso del tiempo y de haber reunido algunas piezas aquí y allá sobre Apple, sus limitaciones, su preferencia por los márgenes altos y viendo el iPhone 5c como producto final, estas son mis razones por las que la compañía de Cupertino sacó este modelo (en orden de importancia, mayor a menor):
Aliviar la presión de venta del iPhone tope de gama, el 5s. El iPhone es la vaca lechera de Apple y siempre dice, orgullosa, que no pueden fabricar suficientes iPhones para el lanzamiento. Más sobre esto después.
Atraer a clientes diferentes a los que ya tiene. Un iPhone de colores era algo nuevo nunca visto en el terminal de Apple, no así en otras marcas como Nokia.
Diversificar la gama del iPhone en un mercado en proceso de maduración. El iPod original era grande y tenía mucha capacidad. Cuando Apple sacó el Mini y luego el Nano, los apasionados de la tecnología predijeron su fracaso bajo el mantra "menos capacidad, precio insultantemente alto". Estaba claro que Apple iba a por otros clientes diferentes.
Reforzar el ecosistema de Apple con clientes que son buenos desde su punto de vista y para ella, (otra vez, no significa que sean mejores personas o que los clientes del resto de fabricantes sean malos) clientes que invertirán en el dispositivo, en apps, películas, libros, series y accesorios.
Quitarse el quebradero de cabeza que supondría tener en producción simultánea dos modelos de iPhone de aluminio. Apple no es perfecta y ya tuvo problemas con el iPhone 5 y los famosos arañazos en el metal exterior y el borde. Imagínate andar con 2 modelos diferentes pero iguales externamente.
Crear un sustituto al iPhone 5 que fuera diferente, con personalidad y que fuera a juego con iOS 7. Hardware y software por fin de la mano, esa simetría y dualidad de la que es tan amante Apple. Bueno, eso y dejar claro que Jony Ive maneja el cotarro, ¿el resultado de que el diseñador jefe de Apple ganase una guerra interna contra Forstall?
Estos son mis 6 aspectos que dan la razón de ser y de su existencia al iPhone 5c. Vender un iPhone low cost puede que estuviera en los planes de algunos directivos y así lo mostraron internamente, pero la decisión final fue que Apple no hace low cost por el mero hecho de ser más barato que la competencia.
Evaluando el fracaso del iPhone 5c
La verdad rara vez es pura y nunca simple - Oscar Wilde.
Esto se pone interesante. ¿Es el iPhone 5c realmente un fracaso? Si tuviera que responder a esta pregunta con un Sí o un No, debería decir que Sí. Pero como dice Oscar Wilde, hay una gama de grises entre el blanco y el negro y en este caso está llena de colores. Del iPhone 5c, claro está.
Para saberlo, debemos evaluar al iPhone 5c en función de los 6 objetivos que se marcó Apple y que hemos visto más arriba. No fue un iPhone low cost ni nunca lo será, así que dejemos eso a un lado porque esa nunca fue la intención final de Apple:
¿Alivió la presión del iPhone 5s y ayudó a vender más modelos? No. En la reunión de accionistas del pasado enero, Cook admitió que se equivocaron al anticipar la demanda y el mix de iPhone 5s / 5c que habían preparado fue erróneo. Esto se tradujo en más iPhones 5c que 5s, por lo que no sólo no alivió la presión sino que se dejaron de vender muchos del modelo superior. Puede que incluso exacerbara el problema al decirle al consumidor "Eh, mira, por 100 dólares más tienes el modelo tope de gama". Se mire como se mire, la rotura de stock siempre es mala porque tienes a clientes deseando comprar tu teléfono pero que no pueden satisfacer su deseo.
¿Atrajo a clientes nuevos y diferentes? Sí. Según Dominic Sunnebo de Kantar Worldpanel ComTech, "la mitad de los propietarios de un 5c vienen de otras marcas, comparado con un 80% de usuarios de un iPhone anterior en el caso del 5s".
¿Ha diversificado la gama? Sí. Por primera vez, Apple tiene a la venta dos modelos nuevos el mismo año. El iPhone 5c sustituye al iPhone 5 tanto en precio como en características, eso sí, de un año anterior.
¿Ha reforzado el ecosistema? Sí. Apple no se fija en la cuota de mercado en general sino en la gama alta, de la cual tiene una gran parte. ¿Que le gustaría tener a todos los clientes de gama alta de Samsung, LG, Nokia y compañía? Sin duda. Por lo visto y según el punto 2, Apple sí ha reforzado su ecosistema.
¿Ha simplificado su cadena de producción? Sí. Con un único modelo de aluminio parece que Apple nos está diciendo que no es capaz de hacer dos de forma simultánea.
¿Va de la mano de iOS 7? Sí. Está clara la influencia de Jony Ive sobre Apple, tanto en el hardware como ahora en el software. Gustará más o menos, pero está claro que van de la mano y se diseñaron siempre en conjunto.
Para mí, el iPhone 5c es un fracaso desde el momento en que el punto 1 no sólo no se ha cumplido sino que se ha agravado. El resto de puntos mitigan en parte el impacto de no haber podido servir todos y cada uno de los iPhones que demandaba el público. Se podrían haber vendido más unidades. Desde el punto de vista financiero no se han conseguido los resultados esperados aunque estratégicamente se hayan cumplido otros objetivos. Ahora bien, menudo fracaso que ha sido, veámoslo en el siguiente punto.
Una metedura de pata de miles de millones
Hace unas semanas, en Appleinsider comparaban las ventas estimadas del iPhone 5c con el resto de la competencia. El cuadro que pinta la comparación es el siguiente:
Desglosando las cifras tenemos que en el cuarto trimestre de 2013, momento en que se lanzaron el 5s y el 5c, las ventas fueron (son estimaciones, según el artículo, y hay que tener en cuenta que Apple nunca desglosa por modelos al igual que otros fabricantes):
iPhone 5s: 31,8 millones.
iPhone 5c: 12,8 millones.
iPhone 4s: 6,4 millones.
Samsung Galaxy S4: 9 millones, acercándose a su renovación.
LG G2: 2,3 millones.
Total iPhones: 51 millones entre todos los modelos.
Total Blackberry: 6 millones entre todos los modelos.
Total Nokia: 8,2 millones entre todos los modelos, hay que tener en cuenta que controla el 90% de la cuota de Windows Phone.
No sé a vosotros, pero que el iPhone 5c se haya vendido más que los flagships de Samsung y LG juntos o más que todos los modelos de Blackberry o más que todos los modelos Nokia hace que me replantee los términos del fracaso de Apple. Incluso si llegaron a vender la mitad de 5c de lo que dice esta estimación, sigue siendo un teléfono que cualquier fabricante querría tener en su catálogo.
¿Metieron la pata al estimar el mix de ventas? Sí. ¿Corrigieron su error cuando se dieron cuenta? Los rumores dicen que modificaron el mix en cuanto pudieron. ¿Hicieron algo al respecto para arreglarlo? Sacar un iPhone 5c de menor capacidad, a fin de cuentas se han vendido 6,4 millones de iPhones 4s con 8 gigas de capacidad. Parece que hay personas que no necesitan más capacidad y están contentas así.
Volvemos al principio cuando decía que a Apple se le mide con un doble rasero y es cierto también en este caso. Pero es algo que se han buscado, para bien y para mal. Apple fracasa, claro, pero lo que importa es la actitud ante el fracaso. Cuando mete la pata intenta arreglar el error lo antes posible y no espera que se solucionen los problemas por sí solos. Y eso también hay que reconocérselo a Apple.
Este artículo es la continuación de El engaño del iPhone 5c y la diferencia entre buenos y malos clientes.
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