Hay ocasiones en las que no logramos comprender muy bien por qué Apple adopta ciertas decisiones, y desde luego, la que se está liando a cuenta de los conectores... Primero fue la eliminación del jack de auriculares, y con el MacBook Pro presentado ayer llegaron dos nuevas controversias: al contar el equipo únicamente con puertos USB-C, para cargar tu iOS necesitarás un adaptador, y la que más nos ha dolido es que Apple ha eliminado el conector MagSafe.
Ha sido una década de uso de un conector que ha evitado no pocos accidentes al tropezarse uno con el cable y desprenderse el conector magnético antes de arrastrar el portátil. MagSafe era una de las soluciones más elegantes que hemos visto en Apple, y sin embargo, desaparece sin miramientos del nuevo MacBook Pro ¿Por qué?
Adiós al ¿mejor? conector del MacBook
La deducción más lógica es que la firma, en su empeño por reducir el grosor del portátil, ha optado por confiar la carga únicamente mediante los puertos USB-C, mucho más compactos y discretos. Otra ventaja adicional de esto último es que el usuario podrá optar por cualquiera de los cuatro puertos dispuestos en el MacBook para cargarlo, y no en único en específico.
Lo malo del asunto es que, por lo general, las novedades presentadas en las nuevas versiones de la casa suelen crear tendencia en aras de la simplificación, y suponemos que la eliminación del MagSafe se irá aplicando en las próximas revisiones del resto de la gama. Pero, hey, no está todo perdido: Griffin nos vende un periférico que devuelve como por arte de magia el preciado conector magnético a los puertos USB-C. Sí, otro accesorio más.
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