Puede que haya sido el rumor más longevo de todos los que hemos cubierto: el iCar o coche de Apple llevaba en mente de la marca desde 2010. Ya lo pusieron en el congelador en 2016, y lo retomaron dos años después. Llevamos más de una década hablando de la posibilidad de tener un coche de Apple. Y el proyecto ha pasado por mil y un obstáculos hasta ser definitivamente cancelado. Recopilemos toda la información que se rumoreaba sobre este supuesto 'Apple Car'.
¿Qué diseño iba a tener el 'Apple Car'?
No se ha sabido qué tipo de coche iba a ser el Apple Car. Una berlina, un utilitario, un monovolumen, algo más grande pensado para transporte semi-público... así que es difícil adivinar qué tipo de diseño iba a tener el coche. Había quien se atrevía a decir que era un SUV, ajustado a lo que ahora mismo se demanda en los Estados Unidos.
Tratándose de Apple, se podía apostar a que será algo muy identificable, por su simpleza, para que el coche destaque bien en las calles. Suele ser la estrategia que gusta en los despachos de Cupertino.
Lo que estaba bastante claro es que el diseñador iba a ser Luigi Taraborrelli, encargado del diseño de los Lamborghini durante dos décadas. Eso ya nos dice que ese diseño no iba a ser de mala calidad. Y algunas patentes nos daban detalles del exterior, como la posibilidad de tener un techo solar de transparencia regulable.
¿Qué prestaciones iba a tener el coche de Apple?
Ante todo, el 'Apple Car' iba a ser un coche eléctrico. Apple no quiere oír hablar de la combustión, y alternativas como las del hidrógeno no se están viendo en las carreteras como para que en Cupertino se lo plantearan. El punto diferencial lo pondría la batería, que sería de una sola célula para maximizar la autonomía del vehículo.
Mi apuesta personal era que en Apple no buscaban el coche más rápido, si no el que más distancia podía recorrer sin tener que recargar y el que una recarga más rápida podía tener. La composición de la batería habría jugado un buen papel en esto.
Incluso el sistema de amortiguación y reducción de vibraciones está siendo patentado por Apple.
Algunas patentes nos ayudan a entrever algunos detalles: esta nos indica un sistema de suspensión y amortiguador de vibraciones en el coche. Si Apple estaba invirtiendo recursos en patentar incluso estos componentes del coche, significa que estaban haciendo un trabajo muy meticuloso.
Más allá del motor o la autonomía, una gran parte de esas prestaciones estaban ligadas a los sensores y al software. Se iban a tener cámaras y sensores LiDAR para detectar obstáculos, y un nivel de conducción autónoma que nos debería haber sorprendido en algún sentido. Por supuesto, nuestros iPhone y Apple Watch habrían estado integradísimos: no me hubiera extrañado ver detalles como que la puerta se hubiera abierto acercando nuestra muñeca al cerrojo.
Localización de la ubicación donde lo hemos aparcado, detección de intentos de robo, aplicación propia... esa iba a ser la parte más atractiva del coche ya que por fin, una tecnológica lanzaba su visión de cómo deberían ser los vehículos eléctricos. "Siri, llévame al trabajo".
Y como el interior del vehículo iba a ser un espacio más abierto por el que los asientos también se tendrán que mover, se hablaba de un sistema de airbags inteligente que se desplegaría dependiendo de la posición del asiento y de los ocupantes.
¿Cómo se iba a llamar el coche de Apple?
Sabemos que Apple había bautizado su coche como 'Project Titan' a nivel interno, pero sobre el nombre final no hay pistas. De todos modos se rumoreaban las apuestas obvias:
- iCar
- Apple Car
- Apple Car+, si el coche acababa siendo vendido como servicio de movilidad urbana
También dependía de si se iban a vender varias gamas y modelos del vehículo eléctrico de Apple.
¿Cómo iba a ser el interior del 'Apple Car'?
Si se hablaba de un coche privado, no habría haber demasiada diferencia a lo que es un coche normal. Si hablamos de algo pensado para ser transporte semipúblico, podríamos haber visto un coche grande con algunos asientos en sus lados, distribuyéndose como un mini-salón.
Donde había más apuestas es en las pantallas. El 'Apple Car' estaba repleto de pantallas. Y esa pista nos la daba la propia Apple con su visión de lo que es CarPlay 2, que puedes ver en la imagen superior.
El sistema de sonido del coche de Apple también tenía pinta de querer romper esquemas, según hemos podido ver en algunas patentes. El esfuerzo de ingeniería usado en los HomePod podía llevarse al interior del vehículo, con eso por sí solo aportando una calidad que jamás habría sido vista dentro de un coche.
Vale la pena mencionar que hay una patente más que describe un Apple Car capaz de ocultar el volante y los pedales activando un modo de conducción autónoma. Es difícil pensar en algo así por las regulaciones y leyes que se encontraría por el camino, pero al menos ya sabemos que en Cupertino han jugado con ese concepto. Los rumores más recientes de Mark Gurman limitaban esa conducción autónoma a un nivel 2, con los ejecutivos de Apple resignándose al hecho que un coche que no haga falta conducir sigue estando lejos por parte de cualquier marca.
¿Cuánto valdría el 'Apple Car' y cuándo iba a presentarse?
El precio era una de las incógnitas más grandes del vehículo de Apple. No sólo por tener que adivinar un número, si no porque quizás incluso no podríamos ni siquiera comprarlo. El Apple Car podía ser perfectamente una suscripción, o un servicio de movilidad urbana que estuviera ligado a los impuestos de una ciudad o región bastante restringida.
Sobre cuándo iba a presentarse, ha habido multitud de fechas y estimaciones. Las pistas más recientes venían de Mark Gurman y hablaban de 2028 como el año en el que posiblemente podríamos tener la keynote en la que se presentase un 'Apple Car'.
Es una lástima, pero finalmente duele que se haya confirmado la cancelación del Apple Car. Desde Cupertino han decidido no seguir invirtiendo recursos en lo que ha sido un esfuerzo demasiado grande, una visión demasiado grande. Toca repartir mejor esos esfuerzos en el Apple Park.
Imagen | Miguel López con Bing Image Creator, Alessio Lin
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