¿Qué probabilidades hay de recuperar un iPhone caído al fondo de un lago? ¿Y si además el lago está helado? A priori parece que pocas ¿Verdad? Pues bien, un joven ha recuperado después de varios meses un iPhone 4 que se le cayó al agua, y atentos al dato, porque para mayor alegría, ha podido comprobar que el móvil funciona a las mil maravillas pese a haber permanecido sumergido en aguas gélidas durante todo ese tiempo.
Claro que esta historia tiene una pequeña 'trampa': el iPhone 4 estaba protegido por una funda Otterbox, que en realidad, fue la gran protagonista de toda esta historia. Un día de pesca que terminó con una desagradable sorpresa, pero con final feliz para el afectado.
Michael Gutrum fue con sus amigos a practicar la pesca en un lago helado, con tal mala fortuna, que su iPhone cayó justo por el agujero en el hielo y lo dio, lógicamente, por perdido. Pasaron los meses y una persona que se encontraba buscando metales en el lago encontró el terminal en el fondo bajo una gran capa de barro. Esta persona lo llevó a su casa y tras limpiarlo, lo dejó dos días en arroz, tras los cuales, probó encenderlo y el iPhone volvió a la vida.
Tras obtener el número del propietario en el propio iPhone le llamó, y a Guntrum le costó creer la historia pensando que se trataba de una broma, pero evidentemente no lo era. El iPhone 4 había soportado durante meses temperaturas bajo cero bajo la protección de su funda Otterbox, y funcionaba tan bien que ahora se lo va a regalar a su madre.
Vía | ChipChick
Ver 20 comentarios