Situaciones de un mundo moderno. La policía noruega detuvo el pasado mes de enero a un joven de 27 años en posesión de 520 gramos de cocaína y pese a reconocer su culpabilidad, el aludido se ha negado a desbloquear su iPhone, protegido mediante TouchID. Las autoridades noruegas, al desconocer el origen de las drogas aprehendidas, sospechan que en el dispositivo se encuentra información de gran valor que les colocaría sobre la pista, pero la legislación protege al detenido en su derecho de no desbloquear el móvil.
Al final, un juez ha dado el visto bueno a la policía para forzar al acusado a desbloquear el TouchID de su iPhone y acceder de esta manera a la información que ahora guarda en secreto. En paralelo, las autoridades están a la espera del registro de llamadas del detenido por parte del operador de telefonía, y de esta manera reunir toda la información necesaria para averiguar el origen de las drogas y actuar contra el resto de la organización.
La privacidad de los datos
Sin embargo, las autoridades se han topado de bruces con dos grandes obstáculos en su investigación: por un lado la legislación que protege la privacidad del detenido, y por otro, el blindaje del iPhone, bien pertrechado ante el ataque de manos ajenas. Como sabes, Apple cuenta con un cifrado de los datos que en combinación con la tecnología TouchID que como te apuntamos, convierten en prácticamente invulnerable al dispositivo, si no se posee la contraseña de desbloqueo, o lógicamente sea el propio dueño quien lo desbloquee con el dedo.
Por otro lado, la posición de Apple en todo este asunto es absolutamente garantista acerca de la privacidad de los datos del usuario. Tim Cook se ha manifestado en esta dirección en múltiples ocasiones, y la firma de Cupertino está trayendo de cabeza a las autoridades, que presionan al gigante para que facilite un acceso remoto a la información en caso de delito.
En Applesfera | Todo sobre privacidad
Vía | MacRumors
Ver 40 comentarios