Rian Johnson, el director y guinista de la última entrega de Star Wars, ha dado una entrevista recientemente en el Wall Street Journal y ha dicho algo realmente curioso: el guión de la película fue escrito en un MacBook Air, íntegramente. Y ese MacBook Air estaba completamente aislado, sin haberse conectado a ninguna red.
La razón por ese aislamiento es sencilla: es la mejor forma de garantizar que nadie de fuera puede entrar en ese ordenador. Puedes intentar aplicar docenas de medidas de seguridad invirtiendo muchos recursos y tiempo... o sencillamente puedes no conectarte a internet nunca. Johnson escribió esa opción.
El MacBook Air se guardaba en una caja fuerte
Lógicamente se hacían copias de seguridad en ese MacBook Air, aunque de forma completamente local. Y se guardaba en una caja fuerte en los Estudios Pinewood cuando no se utilizaba, de modo que sólo el director podía acceder a él.
Había otros trabajos además del guión en los que sí se usaban otros ordenadores conectados con sendos sistemas de seguridad, desde luego. Pero el guión sí que se escribía sin conexión, en un sólo ordenador para que nadie lo viese. Johnson también ha admitido tener un iPhone X y ser un adicto al juego Desert Golfing.
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