Cuando Apple se inicio en el mundo de la telefonía todos teníamos curiosidad, por decirlo así, de como plantearían su modelo de negocio con las compañías telefónicas y de como estás responderían ante una compañía sin ningún tipo de experiencia en el mercado.
Al contrario de lo que parecía en el momento de la salida del iPhone, la estrategia seguida por Apple resulto ser bastante buena. Apple se supo posicionar de manera ejemplar en unos pocos mercados para posteriormente dar el salto al resto de países.
Una vez visto los resultados, Apple lo tuvo más fácil para vender el iPhone 3G con las principales compañías del mundo. Por alguna razón desconocida, el iPhone únicamente podía venderse en una compañía por país, mientras las leyes del país lo permitiesen.
Pero seamos sinceros, esta maniobra por parte de Apple tenía un claro objetivo: que las compañías de telefónica se pelearan como locas por tener el terminal en sus listas. De esta forma, aunque al usuario no le afectaba para nada, Apple salía ganando.
Hasta ahora… y es que poco a poco empiezan a cambiar las reglas del juego. No sabemos muy bien si es Apple la que está forzando este cambio o es la presión de las propias compañías las que lo han conseguido, lo que está claro es que poco a poco vamos a ver el iPhone en más de una compañía por país.
Hace poco era Orange UK la que anunciaba el iPhone 3GS y 3G para finales de año en Reino Unido, de forma que O2 dejaría de tener la exclusividad que ha mantenido durante 2 años. Y hace pocos días era Rogers en Canadá la que de nuevo perdía la exclusividad del iPhone favoreciendo claramente a su competidor Bell.
Y es que, aunque cueste creer, el único que va a salir beneficiado de este cambio de estrategia son los clientes. Un mayor número de compañías ofreciendo el terminal se refleja claramente en un aumento de la competencia y por lo tanto el tener que mejorar las ofertas para que los clientes no cambien de compañía.
¿Alguien se imagina a Orange España vendiendo el iPhone? Lo más seguro es que muchos usuarios contentos de Movistar no se cambiasen a Orange, pero si podrían hacer presión sabiendo que otra compañía tiene el terminal que ellos quieren.
Aunque lo más seguro es que los precios de contratos, llamadas etc no varíen es bastante probable que si veamos una reducción interesante en los precios de compra del terminal y no los abusivos más de 200 euros que pide Movistar en una portabilidad por un iPhone 3GS.
En Applesfera | Orange venderá el iPhone en Gran Bretaña y acabará con la exclusividad de O2
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