Si Apple está interesada en ofrecer su propio servicio de streaming musical, significa que todo puede cambiar. La influencia de la marca de la manzana (y los centenares de millones de tarjetas de crédito asociadas a sus cuentas de iTunes) pueden afectar muchísimo a cómo se venden las canciones a día de hoy en la red, y eso en la industria musical lo saben.
Y probablemente es por ese motivo por el que desde Billboard reflejan que Apple las está pasando canutas para poder llegar a acuerdos que concuerden con sus planes, que pasan por reducir el precio de la suscripción mensual y conseguir más contratos con artistas en exclusiva. De momento la compañía no ha conseguido ni una cosa ni la otra.
"Si en Apple quieren contenido exclusivo, tendrán que gastarse dinero"
El precio que Apple quería para su servicio, unos 7,99 dólares según filtraron en 9to5Mac, se queda corto para los ejecutivos de las discográficas. De momento la posición es que se suba a 9,99 dólares mensuales, como ya tenemos en Spotify y otros competidores, y que si se baja a 7,99 tendrá que ser Apple la que asuma las pérdidas que causará la rebaja.
En cuanto a los tratos exclusivos, es negocio puro: la industria musical sabe que en Apple tienen mucho dinero y quieren que se lo gasten en buenas cantidades para poder "reservarse" a artistas para lanzamientos exclusivos de iTunes. Y claro, en Cupertino no encuentran justo que tengan que gastarse más dinero que sus rivales para conseguir acuerdos por la simple razón de que tienen más dinero.
Con todo, parece que volvemos a estar en una encrucijada donde el modelo musical por streaming se estanca en un precio, 9,99 dólares mensuales, que es el que la industria quiere. Y Jimmy Iovine, contratado justo para tener influencias en el mundo de la música, ve cómo el camino se le complica.
Imagen | Sami Pyylampi
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