A finales del pasado mes de junio vimos cómo Foxconn invertiría unos 10.000 millones de dólares para cumplir el sueño de Trump: fabricar sus componentes en los Estados Unidos. Se barajaban varios estados para inaugurar una fábrica de este proveedor en territorio yankee, pero hasta ahora todo eran elucubraciones.
Ahora nos llegan datos más concretos sobre esta iniciativa: Foxconn ha elegido Wisconsin para levantar tres fábricas, en las que se fabricarán paneles de cristal líquido para smartphones como el iPhone. Empezarían a estar operativas este mismo año que viene, y formarían parte de un Campus de la compañía que se terminaría en 2020.
Wisconsin ya ha puesto de su mano
Para ello, Foxconn necesitaría importar la materia prima desde Taiwán, China y Japón. Las tres fábricas necesitarían una inversión de 1.000 millones de dólares, pero generarán 13.000 empleos para los americanos. Con estas expectativas no es raro ver cómo el gobierno de Wisconsin ya ha aprobado poner 3.000 millones de dólares encima de la mesa como ayuda para esas fábricas. Y desde luego, Apple podría tener mucha ventaja logística teniendo esas fábricas en "casa".
Se espera que el mes que viene se dé el aprobado final para que empiecen las obras. De momento no se habla de otros estados en los que Foxconn podría operar, pero ya se sabe que los directivos de la compañía han estado celebrando reuniones con el gobierno de Michigan desde Shenzen.
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