Carl Icahn es uno de los mayores accionistas de Apple. Posee en la actualidad más de 3.000 millones de dólares invertidos en la compañía (casi un 0,5%) y también es uno de los activistas financieros más conocidos del momento. No en vano, le mencionamos junto con Gene "Apple TV" Munster hace unos meses.
Icahn se ha vuelto una figura recurrente en los últimos años gracias a sus opiniones sobre la acción de Apple. Lleva un par de años comprando porciones de la compañía, asegurando cada vez que se encuentra infravalorada. Al mismo tiempo, aprovecha para darle un manotazo a Wall Street y los analistas echándoles en cara que sus cálculos no son correctos por no tener en cuenta el futuro de la compañía.
Sin tener ningún tipo de información privilegiada, queda claro que utiliza su influencia en el sector para empujar sus acciones hacia arriba y "obligar" a la compañía a hacer caso a sus sugerencias. Icahn entró en la acción de Apple en agosto de 2013, cerca del precio más bajo de los últimos años (según la gráfica de Yahoo unos 64 dólares post-split, ahora está en unos 130 dólares). Desde entonces ha ido aumentando su posición de forma regular.
Las claves de Icahn para duplicar el valor de Apple
Icahn envió una carta abierta a Tim Cook esta semana, alabando su gestión al mismo tiempo que le urgía a aumentar su programa de recompra de acciones. Pero el verdadero interés que ha levantado su misiva es su teoría por la que Apple llegará a casi duplicar su acción hasta los 240 dólares.
Según él, su capitalización bursátil llegará hasta los 1.400 millones de dólares por dos razones:
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La entrada de Apple en el mercado televisivo. Uno que en la actualidad maneja unos 575.000 millones de dólares al año, mucho mayor que el de smartphones.
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Un hipotético Apple Car para 2020. Este mercado es mucho mayor y llega a mover la friolera de 1,6 billones de dólares al año.
Sobre el primer punto, no sabemos si el inversor activista leyó la noticia que salió este lunes. En ella, el WSJ afirmaba que la televisión de Apple fue cancelada el año pasado debido a falta de características diferenciadoras. Todo indica que tendremos que conformarnos con una actualización del Apple TV actual, eso sí, una que promete mucho.
A pesar de esto, el argumento de la entrada de Apple en el mercado del automóvil no es descabellada. Llevamos varios meses escuchando los esfuerzos de Apple en esta dirección, algo para lo que pasarán años hasta que veamos un producto en el mercado.
¿Hasta dónde puede crecer Apple?
Uno de los razonamientos más sólidos de Icahn en favor de su teoría es la inversión en I+D de Apple. La evolución de esta partida en los últimos años la veíamos unos días atrás:
La inversión en este área no sólo no se ha detenido sino que se ha acelerado. De ahí que Icahn vaticine un crecimiento espectacular para Apple. Pero detrás de sus cálculos, cabe preguntarse lo siguiente: ¿hasta dónde puede crecer Apple? ¿Hay algún tipo de límite?
La respuesta que todos tenemos en la cabeza es que sí, hay un límite. Nadie puede crecer eternamente y las compañías van y vienen. Ni Google se salva, una compañía que recientemente está atravesando su particular calvario en 2015.
Y, sin embargo, el caso de Apple no deja de ser especial. Trimestre tras trimestre, la compañía rompe récords y deja las estimaciones de prestigiosos analistas en ridículo. "El iPhone dejará de crecer en algún momento" es el argumento que muchos tienen en la punta de la lengua.
Lo cierto es que llevamos escuchando esto desde los inicios del iPod. "Algún día el iPod pinchará y Apple estará en problemas". El iPod pinchó, pero su causa se encuentra en la canibalización del propio iPhone. El iPhone dejará de ser un área de crecimiento para Apple, pero para entonces puede que esta compañía lo sustituya por otro producto o servicio. O un conjunto de ellos.
No debemos perder de vista las últimas entradas en mercados nuevos, con gran potencial de crecimiento:
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El mercado de la salud.
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Los pagos móviles.
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La domótica y el internet de las cosas.
Apple no es una compañía de un sólo truco
En todos ellos Apple cuenta con una iniciativa más o menos desarrollada. HealthKit. Apple Pay. HomeKit. Curiosamente, en todas ellas intervienen tanto el iPhone como el Apple Watch. Es en este contexto donde hay que encajar las palabras de Tim Cook durante una de las últimas conferencias de accionistas:
[En respuesta a un analista acerca de las leyes de los grandes números] No creemos en tales leyes como las leyes de los grandes números. Esto es un tipo de dogma anticuado, que creo fue "cocinado" por alguien. Steve Jobs hizo muchas cosas por nosotros durante años, pero una de las que nos dejó incrustados es que poner límites a nuestro pensamiento nunca es bueno.
En otras palabras, Cook no quiere que su compañía se autoimponga límites sólo por el hecho de estar entrando en territorio desconocido. En vez de pensar "algún día dejaremos de crecer" su actitud es del tipo "en qué mercados podemos hacer algo bueno y diferente a lo existente". Jony Ive lo expresaba hace tiempo de otra forma:
Estamos muy contentos con nuestros ingresos, pero nuestro objetivo no es ganar dinero. Puede sonar un poco frívolo, pero es la verdad. Nuestro objetivo y lo que nos emociona es hacer grandes productos. Si tenemos éxito, gustarán a la gente y si somos competentes operacionalmente, haremos dinero.
¿Dejará Apple de crecer en algún momento? Es una posibilidad, desde luego, pero no parece que vaya a suceder en el horizonte cercano.
En Applesfera | Buen crecimiento en el mundo, pero espectacular en China: resultados financieros del segundo trimestre fiscal del 2015.
Imagen | Micky.Roth.
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