Mailbox y sus gestos como arma secreta para dominar nuestro correo: a fondo

El correo electrónico, por mucho que lo hayan querido cambiar, no evoluciona. Sigue siendo, desde los comienzos de internet, la forma más básica y más usada de comunicarse con una o varias personas. Algunas aplicaciones están optando por maquillar el correo para que parezca algo mucho más simple, con menos o más éxito. Mailbox, programa para iPhone del que os informamos hace poco, intenta hacer justo eso. He podido probar la aplicación, y aquí tenéis mis impresiones.

Mailbox: el correo como lista de tareas

Mailbox está dirigido, sin duda alguna, a las personas que tienen que gestionar decenas o incluso centenares de correos al día y lo hacen con Gmail. Hay varias aplicaciones de calidad para poder dejar de depender de la web, pero personalmente siempre he terminado volviendo al clásico gmail.com para dejarme de complicaciones y descargas de la enorme base de datos de correos con la que trabajo a diario.

Así que Mailbox tiene una tarea muy importante: integrarse con Gmail y trabajar de forma transparente con el servicio sin que eso implique demasiado destrozo en gmail.com. ¿lo consigue? No a la perfección, pero es el servicio que más se le acerca de todos los que he probado.

Para entender la estructura que utiliza Mailbox lo mejor es ver qué podemos hacer con cada correo que nos llegue a la bandeja de entrada:

• Marcarlo como completado, con lo que el correo se etiqueta como leído y se archiva.

• Marcarlo para leerlo más tarde, con lo que el correo se mueve a una lista de mensajes con esa marca o saltará de nuevo a la bandeja de entrada en el momento que queramos: en unas horas, al anochecer, mañana, el fin de semana, la semana que viene, en un mes o ‘algún día’, una fecha indeterminada con correos sin urgencia. Por supuesto, también podemos seleccionar una fecha personalizada.

• Guardarlo en una lista personalizada que nosotros mismos creemos usando Mailbox.

• Eliminarlo, con lo que el correo se va directo a la papelera.

Son cuatro funciones simples, que Mailbox nos facilita para conseguir el soñado inbox zero a diario y gestiona de forma impecable con su arma principal: los gestos.

Los gestos de Mailbox: tomad nota, resto de gestores de correo

Los gestores de correo electrónico dedican muchísimo tiempo a ver cómo pueden reducir al máximo los botones de la interfaz para conseguir simplicidad en sus aplicaciones, pero Mailbox ha cortado por lo sano y prescinde de la mayoría de ellos. Conserva sólo los simples, y confía las acciones que más vamos a usar hacia una serie de gestos simples. Y han acertado de lleno, sirva como prueba su vídeo promocional:

Rehagamos esa lista de funciones con sus gestos:

• ¿Quieres archivar un correo? Deslízalo levemente hacia la derecha.

• ¿Quieres eliminar un correo? Deslízalo más hacía la derecha.

• ¿Quieres leer un correo más tarde? Deslízalo levemente hacia la izquierda.

• ¿Quieres enviar el correo a una de tus listas? Deslízalo más hacia la izquierda.

No tiene más, y cuando te das cuenta gestionar tus correos con Mailbox se reduce a unos cuantos movimientos con el dedo. Muchísimo más rápido y simple que ir archivando los correos marcándolos y pulsando botones como con la aplicación oficial de Gmail. Pone la interacción que tenemos con el resto de aplicaciones en perspectiva, ya que la mayoría no exprime todo este abanico de gestos como debería. Otro ejemplo donde se aprovechan bastante bien los gestos puede ser Tweetbot, sin ir más lejos.

De hecho, no hace falta toda la filosofía de la bandeja de entrada de correos como una lista de tareas para que los gestos cobren más protagonismo: si hay que tratar una lista de elementos en cualquier aplicación siempre se puede adoptar este método. La curva de aprendizaje inicial puede ser algo más larga, pero definitivamente se notan los resultados a largo plazo.

Una buena primera impresión, pero con algunas faltas en integración con Gmail y no para todos

Echo de menos algunos detalles para que Mailbox se integre mejor con Gmail: la aplicación no muestra las etiquetas de los mensajes, y podríamos tener algunas opciones de formato de texto al escribir los mensajes desde la aplicación.

Adoptar Mailbox como aplicación móvil para consultar nuestros correos de Gmail también tiene un pequeño precio: nos aparecerán etiquetas (cuatro como mínimo dependiendo de si usamos listas propias o no, las podéis ver justo a la derecha) que gestionan las secciones de Mailbox, aunque afortunadamente basta con ocultarlas de la barra lateral y de los mensajes desde gmail.com para que la integración no se note.

Luego está el dilema de adoptar MailBox cuando usas Gmail desde varios dispositivos diferentes: la forma de usar la aplicación desde el iPhone es fantástica pero no se pede aplicar de la misma forma hacia el resto de mensajes. Es decir, habría que adoptar una forma diferente de usar nuestros correos en todas partes para usar bien Mailbox. Y eso no lo va a hacer todo el mundo. Pero aún así, el método que nos ofrece la aplicación es fantástico para los que reciben docenas de correos cada hora.

Invitaciones ya en marcha, lanzamiento para dentro de unas semanas y garantía de una versión gratuita

Mailbox está todavía en una fase de pruebas (agradecemos al equipo de responsables el habernos facilitado acceso), pero a partir de ya mismo podéis solicitar una invitación a modo de reserva para una lista de espera. Los miembros de esta lista recibirán un código para poder probar la aplicación en sus teléfonos gradualmente.

Cuando Mailbox vea la luz dentro de unas semanas en la App Store será gratuito, y a medida que pase el tiempo se mantendrá una versión sin cargos junto con una versión premium con ventajas especiales. Por el momento, si queréis usarla, hay que pedir una reserva y/o esperar a que Mailbox esté disponible en la App Store.

Si sois usuarios intensivos de Gmail, Mailbox merece una prueba casi obligatoriamente.

Sitio oficial | Mailbox