Servicios de mensajería instantánea móvil hay muchos. Ya se dice que demasiados. Pero somos tan quisquillosos con ellos que siempre damos la bienvenida a nuevas alternativas para ver si son la solución perfecta que siempre andamos buscando. Vamos a ver una de estas alternativas, llamada Inbox, que ha aparecido hace poco más de un mes y me ha dejado bastantes buenas sensaciones.
Inbox es, en una palabra, simple. Para lo bueno y para lo malo, pero aún así -y si los desarrolladores siguen actualizando el servicio- promete. Tiene mucho hincapié en nuestra privacidad, y de hecho es el primer ejemplo de servicio sencillo de mensajería en el iPhone que aplica funciones más propias del especializado Snapchat.
h2. Inbox: interfaz minimalista pero funcional
¿Habíais visto una interfaz de mensajería instantánea así de simple en el iPhone?
Inbox no se integra con ninguna red social, pero su registro es rápido: hay que introducir un correo, un nombre de usuario y una contraseña. Listo. Una vez tengamos nuestra cuenta podremos confirmar (opcionalmente) nuestro número de teléfono por si queremos buscar personas de nuestra agenda que también se hayan registrado en Inbox o invitar a los que no lo hayan hecho. Si no encontramos a nadie, siempre tenemos la opción de chatear con nosotros mismos para probar el cliente y sus características.
Lo remarcable de Inbox empieza cuando abrimos una conversación con alguien. La interfaz es completamente lisa, sin globos, ni estilos. Nada. Sólo el texto que mandamos, encabezado por el sobrenombre de la persona con la que estamos conversando. Creo que es la interfaz más sencilla que he visto en cuanto a aplicaciones de mensajería instantánea. Y no estamos en una de esas interfaces que esconden muchas funcionalidades detrás de una interfaz simple: son meros detalles, pero éstos son precisamente los que más se buscan ahora mismo: los referidos a nuestra privacidad.
h2. La privacidad es la primera preferencia en Inbox, pero no la única
Detalles como por ejemplo la habilidad para ocultar todo el texto de una conversación que aparezca en pantalla tras agitar ligeramente el móvil, ideal para cuando tengamos mirones cerca y no queramos que nadie vea lo que estemos escribiendo en el móvil:
Esto es lo que ocurre cuando agitamos el móvil. Para ver un texto sólo tenemos que poner el dedo encima, y volviendo a agitar el terminal redescubrimos toda la conversación.
Cualquier mensaje de los que hayamos enviado también se puede eliminar de la conversación: basta con deslizarlo hacia la izquierda con nuestro dedo. Y no sólo se elimina en nuestro terminal, sino que también desaparece en el terminal del contacto con el que hablemos.
En algunas de las capturas que os muestro también podéis ver cómo cada vez que hago una captura de pantalla de la conversación ésta se sube y se comparte automáticamente. De este modo, Inbox evita que alguien tome capturas de la conversación sin permiso del contacto con el que estemos hablando. Y ya sea con estas capturas como con cualquier otra imagen que enviemos a la conversación, ésta sólo se puede ver mientras mantengamos el dedo pulsado encima del icono de la imagen. En resumen, Inbox es un servicio ideal para aquellos que exijan un nivel de intimidad extra en sus chats.
Como veis son funciones bastante quisquillosas, pero que garantizan nuestra privacidad y que casi ningún otro cliente de mensajería tiene. Pero no todo es privacidad y protección de datos: Inbox nos permite editar rápidamente nuestras imágenes con iconos, filtros e incluso con texto al estilo de los memes de internet. Y si queremos, podemos compartir esas imágenes editadas de forma pública en Instagram, Facebook o Twitter.
Nada como un desenfoque y un fez para que el Doraemon de mi mesa de trabajo adquiera algo de estilo.
h2. Carencias y posibles mejoras
Inbox tiene un mes de vida, pero su interfaz y las características que han decidido lanzar antes que nada ya dicen en qué quieren centrarse para destacar entre sus competidores. Vale la pena descargarlo (es gratuito y no hay ninguna compra opcional in-app por el momento) para ponerlo a prueba, pero todavía no lo consideraría un cliente completo.
En definitiva, Inbox es una de esas aplicaciones que vale la pena descargar y probar. En sus inicios ya tiene ciertas peculiaridades que destacan, y si su dirección es la de ir añadiendo más características puede convertirse en un cliente prometedor. Ah, y también tiene versión para Android.
Sitio oficial | Inbox Descarga | Inbox para iOS 7 o posterior (gratuito) en la App Store
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