Apple siempre se ha relacionado con el mundo mediante los Mac. Uno de los grandes cambios en la historia de la informática fue pensar en los años 70 que cada hogar necesitaría uno en el futuro. Con el apellido “Computer”, la marca dejaba claro que quería llevar las máquinas a nuestro mundo doméstico integrándolos no con el resto de electrodomésticos de la casa - considerados por aquel entonces como máquinas “tontas” - sino más próximos a nosotros como herramientas de potenciación y de creatividad.
La idea de la compañía en este 2017 de “volver al iMac” relanza varios conceptos interesantes: uno, es la apuesta por el icono básico con el que se identifican los ordenadores de la manzana. Su forma, su idea, su diferenciación respecto al resto: todos sabemos que eso que estamos viendo en la pantalla es un iMac, aunque en la película tapen la manzanita con un post-it. Hoy en día el concepto Mac está repartido entre Mac mini, Mac Pro, iMac y la gama de portátiles, pero a pesar de ese “skyline”, quien define la idea del todo en uno de Steve Jobs es el iMac, el auténtico heredero del Macintosh original.
Hartmut Esslinger esbozó a principios de los 80 las guías de diseño para convertir los ordenadores de Apple en iconos
Es importante entender que la letanía necesaria hasta llegar aquí no es casualidad - como absolutamente nada en Apple - y que seguimos heredando como parte de un ADN entrelazado con la marca las guías de diseño que Hartmut Esslinger escribió a principios de los 80 dentro de lenguaje de diseño “Snow White”: líneas simples, marcadas y sin adornos, sin texturas, y la ilusión de una carcasa que diera la impresión de que el ordenador es más pequeño de lo que realmente es. Esto consiguió que los ordenadores de Apple comenzaran a ser reconocidos y alcanzaran cotas de popularidad importantes. El icono era importante, el reconocimiento inmediato era esencial para que viéramos no sólo a un Mac, sino también a toda la compañía y su visión encima de aquella mesa. Este iMac puesto al día este año es una declaración de intenciones, y una vuelta a la carretera del mundo Mac.
iMac 2017: un diseño aún vigente
En 2012 llegó el último gran cambio de diseño conocido para el iMac: cuando lo analicé en Applesfera imaginaba que aquella nueva apariencia física daría mucho que hablar: y sobre todo, que duraría muchos años. En este 2017 cumplimos ya cinco años con ese diseño, que todavía está perfectamente vigente: el familiar frontal - que no ha cambiado prácticamente incluso desde la anterior generación al 2012, es lo más reconocible del producto. Cuando lo giramos, descubrimos el filo - en su momento parecía imposible - con más espacio central en la parte trasera para contener al resto de componentes.
Apple iMac 21,5 pulgadas (pantalla Retina 4K, procesador Intel Core i5 de cuatro núcleos a 3,0 GHz) (Modelo Anterior)
Apple iMac 27 pulgadas (pantalla Retina 5k, procesador Intel Core i5 de cuatro núcleos a 3,4 GHz) (Modelo Anterior)
Podemos cambiar la RAM y - aunque no es fácil - incluso la CPU: ¿empieza el iMac a ser más modular?
Físicamente es idéntico a los que ya conocemos. Contamos también con el acceso sencillo a cambiar la memoria RAM mediante una cómoda puerta de acceso trasera, y en este modelo incluso podremos cambiar el mismísimo procesador - algo inédito en Apple - aunque tendremos que abrir por completo la carcasa separando la pantalla. Aún así, es un paso interesante para - quizás - una nueva generación de iMac más modular, más personalizable - algo que se llevaba pidiendo desde hace años a Apple. De momento contamos con esta ventaja respecto a la generación anterior, algo que ya están aprovechando los primeros compradores.
Todos los tamaños de la gama (21,5” y 27”) cuentan con exactamente los mismos conectores y capacidades, que evidentemente también se han actualizado respecto a la generación anterior:
- Toma para auriculares de 3,5 mm
- Ranura para tarjetas SDXC
- Cuatro puertos USB 3 (compatibles con USB 2)
- Dos puertos Thunderbolt 3 (USB‑C) compatibles con:
- DisplayPort
- Thunderbolt (hasta 40 Gb/s)
- USB 3.1 Gen 2 (hasta 10 Gb/s)
- Thunderbolt 2, HDMI, DVI y VGA (requieren adaptadores que se venden por separado)
- Gigabit Ethernet 10/100/1000BASE-T (conector RJ-45)
- Ranura de seguridad Kensington
La apariencia física icónica a la que nos tiene acostumbrado el iMac sigue estando presente, y vigente, para esta renovación interna que vuelve a situar el modelo sobre la mesa. Quizás para la próxima generación deberíamos contar con algo que haría brillar aún más la línea futurista del modelo, y dispararla un poco más hacia el futuro: eliminar al máximo el marco negro de la pantalla (al menos los laterales y el superior). Seguro que esta tendencia que a partir de Septiembre veremos con el nuevo iPhone, y posteriormente con los iPads futuros, acaba llegando también al iMac. Mientras tanto, la presencia del modelo actual sigue siendo indiscutible, convertido como lo está en un icono después de todos estos años - aunque siga pareciendo el iMac de siempre.
La importancia de mejorar cada vez la pantalla
La pantalla 5K con los mil millones de colores y 500 nits es espectacular como espacio de trabajo y ocio
El iMac, como en su momento lo fue el Macintosh, es una metáfora de la ventana al mundo digital que hay detrás de él. También ocurre con el iPad - sobre todo - en el que lo importante, lo que realmente se convierte en herramienta para un feedback perfecto entre la máquina y el usuario, es la pantalla. El iMac de la generación anterior contaba con una pantalla asombrosa que elevó hasta 5K la resolución para mejorar el detalle de cada imagen. Es curioso, porque desde que salió el iMac 5K hace cinco años, la competencia ha imitado la apariencia “todo en uno” del ordenador insignia de Apple, pero pocos - por no decir ninguno - ha contado con una pantalla de esta calidad.
En esta generación, la compañía de Cupertino mantiene la asombrosa resolución de 5120 x 2880 píxeles, pero mejora la cantidad de colores a mil millones - casi nada - y sube hasta los 500 nits de brillo. Un nit es una medida de luz estimada sobre un área, y típicamente los monitores de escritorio suelen llegar a los 200 o 300 nits. Con sus 500 nits, esta nueva generación de iMac se sitúa al nivel las televisiones de alta definición, que suelen comenzar en 450 - y según la propia compañía, es un 43% más brillante que el modelo anterior.
En el uso diario, notamos como estas mejoras de la pantalla nos sorprenden también al combinarse con el espacio de color P3 - el estándar cinematográfico - y se nota especialmente en películas y vídeos con un gran espectro de colores, siendo más realistas y vivos en el visionado. La combinación de todas estas novedades en una pantalla y un modelo como este iMac lo hacen especialmente atractivo - también en la mejora del hardware gráfico del que hablaremos más adelante - para diseñadores, entusiastas del vídeo y los gráficos 3D.
Gracias a la conexión Thunderbolt 3 podremos conectar un monitor externo 5K o dos monitores 4K - aunque seguimos sin poder utilizarlo como monitor si quisiéramos (por ejemplo) conectar un MacBook Pro o incluso una consola. Siento el concentrador de vida digital como debe ser el iMac, esta opción debería aparecer dando al usuario la versatilidad de disfrutar de esta tremenda calidad de pantalla también con fuentes externas de vídeo.
Una de las preguntas recurrentes en esta era de las pantallas táctiles, es por qué Apple no hace del iMac un ordenador “táctil” tal y como Microsoft ideó su Surface Studio. La respuesta es la misma a cuando nos preguntan por qué el iPad no lleva macOS: la compañía piensa que el sistema operativo debe estar diseñado y pensado para soportar una interfaz táctil, y no una simple capa por encima que emula el click de un ratón sobre ella. Sólo cuando el sistema controla nativamente este método de entrada del usuario, es cuando las aplicaciones pueden exprimirlo al máximo y es realmente intuitivo. Un sistema como macOS no se aprovecha al 100% tal como está como interfaz de entrada táctil porque no está diseñado para eso. Y una interfaz táctil es mucho más que “hacer click con el dedo sobre botones”.
Apple iMac 21,5 pulgadas (pantalla Retina 4K, procesador Intel Core i5 de cuatro núcleos a 3,0 GHz) (Modelo Anterior)
Apple iMac 27 pulgadas (pantalla Retina 5k, procesador Intel Core i5 de cuatro núcleos a 3,4 GHz) (Modelo Anterior)
Es por esto precisamente por lo que funciona el iPad: la apuesta de Apple es crear con iOS una dirección pensada para el mundo táctil desde cero, y no darnos la sensación de que estamos emulando un ratón con una pantalla táctil que tiene muchas más posibilidades. Mirando la dirección opuesta, el iMac no está pensado por su posición sobre el escritorio para ser usado con las manos sobre la pantalla: no es una respuesta natural del usuario ni mucho menos parece un método de precisión para introducir o refinar datos dentro del Mac.
Sin embargo, Apple sí que pone a disposición de todos una pantalla táctil fantástica con la que podemos refinar estos contenidos para el Mac: se llama iPad, y es realmente una superficie pensada e inventada para especificar estos detalles y luego acabarlos en el Mac aprovechando la mayor superficie. No se trata de tener muchos dispositivos que hagan lo mismo, sino de tener los adecuados para hacer ciertos trabajos en cada uno, de la mejor forma posible y combinar los resultados: ese es el auténtico ecosistema Apple.
Más potencia, llega la Realidad Virtual
Sin duda una de las novedades de la última Keynote de la conferencia de desarrolladores de este año ha sido la apuesta de Apple por la Realidad Aumentada - que exploraremos con iOS - y la Realidad Virtual - que disfrutaremos con macOS y las nuevas generaciones de Macs. El primero de ellos es este iMac que hoy estamos repasando, y es que Apple ha puesto mucho empeño en convertirlo no sólo en una buena máquina para los profesionales gráficos, también en un gran ordenador de escritorio potente en ciertos ámbitos donde típicamente la compañía no estaba presente, como la RV.
Los nuevos procesadores son los últimos Kaby Lake lanzados por Intel, y en el modelo de análisis contábamos con un Intel Core i5 a 3,4 Ghz y 8 GB de memoria RAM DDR4 a 2400 Mhz. El desempeño, incluso para no ser el modelo que integra la versión más rápida del i7 es realmente bueno, batiendo a su competidor más directo - el Microsoft Surface Studio - en prácticamente todas las configuraciones:
Para apoyar a la subida de potencia del nuevo iMac, Apple no ha dudado en llevar también el subsistema gráfico a un nuevo nivel, incorporando - excepto en el iMac de “base” de 21,5” - las nuevas Radeon Pro, un gran paso hacia adelante sobre todo pensando que venimos de unas tarjetas como las Radeon R9, más modestas en términos de potencia. La nuevas Pro están basadas en arquitectura Polaris y están optimizadas para trabajar con aplicaciones como Adobe Premiere Pro, After Effects, Photoshop, etc...
Apple ha buscado una tarjeta gráfica que no sólo es potente: también está diseñada para ser excepcional en Realidad Virtual, streaming de juegos y nuevas tecnologías
La joya de la corona es, sin duda, la Radeon Pro 580 que incorpora el modelo más alto dentro de la familia de estos nuevos iMac: toda una tarjeta que no sólo tiene potencia y rendimiento de sobra para las tareas más exigentes del profesional gráfico (estamos hablando de 5,5 TFLOPs de potencia bruta), sino que también contaremos con un entorno perfectamente preparado para la manida Realidad Virtual que llegará con la macOS High Sierra y los nuevos productos y juegos previstos para el año que viene. Interesantísimo entender como no sólo estamos hablando de potencia bruta sin más, también de nuevas opciones para todas las novedades en estos campos, como la grabación de juegos de alto rendimiento en streaming con “carga cero” en la CPU principal o mejoras diseñadas específicamente para Realidad Virtual: esta es la base de la arquitectura Polaris en las que se basan esta nuevas Radeon Pro, una muy buena decisión de Apple con la que apoyar esta generación de nuevos iMac.
Sonido, accesorios y disco duro
En este ámbito, no ha habido novedad significativa respecto a la generación anterior, quizás porque había poco margen de mejora aquí: el sistema de sonido es idéntico al que ya conocíamos, y mantiene la mejora en potencia, claridad de sonido y profundidad en los detalles - quizás sólo pediría más contundencia en los graves - pero sigue siendo perfecto casi para cualquier oficina o casa con la suficiente calidad como para utilizarlo en el día a día sin necesidad de adquirir unos altavoces externos para poder apreciar todos los detalles sonoros - a menos que seáis músicos o entusiastas que necesiten en este ámbito tener completo control sobre ello.
El disco duro SSD sigue la trayectoria excepcional de los últimos MacBook Pro, con tasas de transferencia casi imbatibles en el mercado
Del disco duro poco se puede decir a lo que no hemos venido comentando ya desde por ejemplo el análisis del MacBook Pro de finales de 2016: es de los mejores SSD del mercado. La velocidad de lectura y escritura hace que aplicaciones típicas de benchmarking como la de BlackMagic que habitualmente utilizaba en estos reviews ya no tengan mucho sentido, ya que superan todos los puntos, uno por uno, en velocidad de transferencia y de lectura. Esto además acelera bastante el trabajo con el Mac, tanto en la carga de grandes archivos, la inicialización del sistema operativo... En mi opinión, Apple incluso debería dejar de ofrecer la opción de la Fusion Drive para integrar directamente discos duros SSD al completo - que es una de las áreas que más mejoran un ordenador y el trabajo diario con él.
En cuanto a los accesorios, contamos con los sospechosos habituales: el último Magic Keyboard, que mejoró respecto a la generación anterior en tacto y comodidad, aunque sigo echando en falta la retroiluminación para los trabajos con poca luz en la sala. El Magic Mouse de segunda generación también está incluido en el pack: aquí es cuestión de gustos ya que hablamos de ergonomía y casi caprichos personales a la hora de elegir ratón, pero personalmente el Magic Mouse y su perfil bajo y sencillez de uso es mi elección para el día. Como contra, el terrible sistema de carga con el cable Lightning que te obliga a inutilizar el ratón mientras lo haces, ya que debemos volver el dispositivo del revés.
Las configuraciones de esta generación
Apple mantiene las pulgadas (21,5” y 27”) que ya veíamos en generaciones anteriores y comienza con tres modelos por cada tamaño. El modelo de entrada está en 1.305,59€ y es el único que yo no recomendaría: no cuenta con pantalla Retina 4K, tiene tarjeta gráfica integrada y es el único iMac de esta generación con doble núcleo, en lugar de con cuatro. El siguiente modelo son aproximadamente 200€ más y ofrece pantalla Retina 4K con espacio de color P3, Radeon Pro 555, memoria RAM más rápida y un Core i5 de cuatro núcleos. La diferencia respecto al siguiente de este tamaño pantalla es la inclusión de una Fusion Drive y mejora en la tarjeta gráfica (Radeon Pro 560), con lo que si no queremos exprimir al máximo estas dos mejoras, el modelo intermedio mantiene una buena relación calidad/precio.
Cuando pasamos a la configuración de 27”, lo tenemos más fácil: todas son pantalla Retina 5K, cuentan con la misma RAM de base - y a la misma velocidad - y la gran diferencia es la tarjeta gráfica. En este segmento, el modelo de entrada a 2.105,59€ es muy buena máquina, excepto si esperamos o queremos contar con la experiencia completa de la Realidad Virtual que llegará de cara a 2018: aquí necesitaremos esa Radeon Pro 580, saliendo todo el conjunto por 2.605,59€.
En esta generación Apple ha sabido balancear potencia y prestaciones, poniendo sobre la mesa equipos realmente potentes muy preparados para las tareas más profesionales - tanto si las hacemos en una oficina o en casa como hobby. Además, advierte del futuro que está por llegar con la Realidad Virtual que podría volver a situar al Mac bajo el foco de los protagonistas - ya que el ámbito es exclusivamente de los sobremesa, al igual que la Realidad Ampliada lo será de los dispositivos iOS.
El futuro del Mac es el iMac
Sinceramente, desde el anuncio del iMac Pro en la conferencia de desarrolladores me plantee si el Mac Pro debería realmente salir al mercado. Viviendo en un mundo donde las tarjetas gráficas incluso se pueden conectar de forma externa al Mac (las cada vez más famosas eGPU) un ordenador como el iMac debería poder desempeñar todas las tareas de alto rendimiento que alguien necesite en un trabajo. El iMac Pro persigue ese camino, y el Mac Pro explorará la senda de para quienes la personalización sea esencial al construir el ordenador que necesitan.
Este iMac de 2017 es el iMac más Pro que jamás ha lanzado Apple: el auténtico Mac elevado a la máxima potencia
En todo este punto, ¿donde queda el iMac “normal” que Apple nos presenta en 2017? Precisamente, en el extremo más próximo al mercado profesional, sobre todo en las configuraciones de 27”. Lo que comenzó siendo el concepto de un ordenador doméstico, pensado para hacer tareas en casa o en escuelas se ha convertido en una estación de trabajo potente con la mejor pantalla que se puede comprar, y todo en uno. Diseño, ecosistema, potencia y unos precios que sí mantienen la línea de la generación anterior: este es el iMac más Pro que ha existido nunca, hasta que llegue el iMac Pro - y aunque esté en otra órbita.
El iMac que conocemos, hacia una dirección desconocida: ser el mejor Mac que podría fabricarse, en todos los sentidos. Una idea realmente madurada, que no pasa por ofrecer tecnologías de moda que no aplican en el día a día - como la pantalla táctil en el propio Mac que comentábamos antes - sino mejorar todo lo que puede ser mejorable de la máquina, a unos precios contenidos. Una generación fantástica, diseñada con mucha cabeza y corazón, que será la puerta de entrada a nuevos mundos - en todos los sentidos - los reales y virtuales.
En Applesfera | Todo sobre el iMac
Apple iMac 21,5 pulgadas (pantalla Retina 4K, procesador Intel Core i5 de cuatro núcleos a 3,0 GHz) (Modelo Anterior)
Apple iMac 27 pulgadas (pantalla Retina 5k, procesador Intel Core i5 de cuatro núcleos a 3,4 GHz) (Modelo Anterior)
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raul.beldadiaz
"Para quienes lo busquen: el iMac ya tiene pantalla táctil, y se llama iPad".....Me habéis matado.
Jairon
Lo que si podrían hacer es sin subir de pulgadas a los dos modelos, quitarles algo de marco que ya me recuerda a los ipads antiguos, mucho marco desaprovechado, os imaginais un imac sin marcos o que fuera todo pantalla, seria la caña.
amadorjaen
En un imac de 27" de 2600 € a mi humilde entender, esta es la cuenta de la vieja:
400-500€ de sobrevaloración de Apple que tenemos que asumir por uso de componentes de calidad (entiendo), diseño y sistema operativo, si necesitas mac OS, no recomiendo hackintosh, dan problemas siempre. Si quieres Windows, ni siquiera sigas leyendo, no tiene sentido un imac. Si necesitas ambas plataformas, sigue.
Si hacemos comparativas, metamos un monitor hp 27" 5k, similar (sólo similar) de valor 1000 euritos.
El resto del importe (aprox 1000€) lo tienes por los componentes. Cierto es que no vas a tener un PC pepino de 1000€, como podrías pillarte por ejemplo en los múltiples ejemplos de pc componentes, pero tampoco la experiencia de uso de Apple, ecosistema (si no tienes nada más de Apple pues pierdo puntos) ni amplitud de uso (Windows y mac nativos ) en el equipo.
Así que en definitiva, me atrevo a decir que en el mundo de las burradas de Apple, que están porque se pagan, y haberlas haylas, de las mejores relación calidad/precio después del iPad 2017 (no pro), está en mi humilde opinión ESTE imac de 2017 (27", 580). De los anteriores, corramos un tupido velo.
Todo depende de la oportunidad. Parece que esta familia imac si la han mejorado, y vuelven a merecer la pena.
pd.- tengo un imac 2009 27" con un core 2 duo de 3 GHz, con un disco duro ssd 128 gb y 1 tB, 10 gb RAM (ampliada) que me costó 1350€ de la época, que todavía se actualiza y va relativamente bien (gracias al bendito SSD) , todo depende para el uso que le des. Office's, blender (básicos), fotos, vídeos, torrents, películas, etc, sin problemas. También lo uso como monitor externo alucinante de una Surface pro 4 i7 (sí, también me flipa). Por cierto, con bootcamp, tengo w7 y hasta revit va decente. (Repito, todo depende para lo que los uses). Me ha salido muuuucho más barato que cualquier pc de la época. Todavía esa pantalla es una gozada, imaginad la 5k .
Tan solo decir que en mi humilde opinión , habrá productos que merezcan la pena o no, y en Apple es muy importante si usas su ecosistema.
domingoespejo
Apunto estuve de darle al botón de pedido del "básico" de 27''. Pero me arrepentí. La solución ha sido un i7, 16Gb de ram y una GTX 1060 con 6 Gb que si que está preparada para VR, con los 1000 eruces que me sobran cruzo los dedos para que no tarde mucho en salir el Mac Mini.
Pensando fríamente me parecia mucha pasta para un ordenador que no podría con la RV y aunque los materiales son de mucha calidad, el diseño ya lo veo que está a punto de ser desbancado por el próximo modelo y el tema de refrigeración para darle algo de caña al gaming no es el más óptimo. Pero lo que me terminó de decidir es que no necesito un monitor de tanta calidad de casi 1000 euros (que posiblemente los vale).
No es para mi, lo veo desproporcionado, un monitor de clase premium con componentes de gama media. Totalmente desequilibrado.
alejandro.martin.129
"En mi opinión, Apple incluso debería dejar de ofrecer la opción de la Fusion Drive para integrar directamente discos duros SSD al completo"
No, no y no. Algunos aun necesitamos bastante capacidad y los SSD no cubren esa necesidad para nada, por lo menos no a un precio razonable.
Lo que si que encuentro que debería hacer apple es dejar de ofrecer una capacidad irrisoria para el SSD del fusion drive por defecto y sin posibilidad de ampliación, y dejar elegir el fusion drive un SSD de entre todas las capacidades que ofrecen, y un HDD de entre toas las capacidades que ofrecen. es decir, personalizar el fusion drive según las necesidades de cada uno. Si quieres un fusion drive con un SSD de 512 y un HDD de 3TB adelante, y si quieres solo un SSD pues adelante, pero eliminar la opción de fusion drive es un error mayúsculo.
Por otro lado, considero que el iMac grande debería haber crecido hasta las 32", con esta resolución de pantalla nos lo podemos permitir sin problemas.
maxi.s.yo
Hola ! ¿cómo están? estoy por comprar el imac 21 MNE02E/A ... pero tengo dudas ya que en 2012 compré un imac 27 con tarjeta gráfica radeon y recalentó y se rompió... entonces cuando leo RADEON me genera cierta desconfianza.. me gustaría que me comenten si este nuevo imac podría llegar a tener este gran problema... saludos y gracias!
ratatatan
¿Alguien sabe de algún servicio técnico fiable en donde pueda cambiar mi hdd por un ssd en un mac mini late 2014? He visto que en magnificos hacen este cambio pero no me fío y tampoco sé hacerlo yo solo.
Orlando
Hace una semana e comprado el modelo 21.5 4k , la pantalla sobresaliente ,pero el disco de 1 tera 5400rpm es una estafa ,ayer con ayuda de youtube a podido abrirlo(perder la garantia ) ye instalarle u ssd samsung evo 850 de 500gb: Ahora es otra cosa !!!, en la tienda al vendedor le dije que no me interesa el apple care, ni ninguna garantia extendida,(lo voy a abrir le dije y se sorprendio )le dieje estamos en la epoca de los M.2 nvme y un 5400rpm es una chotada,este modelo no tiene slot M.2 !!
awsomo
La RAM solo es accesible al usuario en el modelo de 27", igual que en los anteriores.
La posibilidad de cambiar la CPU no la veo demasiado atractiva, ya que para cuando haya una mejora sustancial el chipset ya no será compatible.
Yo no creo que se esté yendo a modelos más modulares y personalizables, más bien todo lo contrario.
La mejor noticia es la generalización de las pantallas retina, en todas las configuraciones salvo la de entrada de 21".
JGP
Poco se habla de la estafa a mano armada que sigue siendo este ordenador. I5, 8 GB de RAM, fusión Drive de 1 TB (que básicamente es HDD) y una gráfica sencilla. Todo eso no vale más de 500€. Obviamente ese equipo es insuficiente para las tareas procesionales lo que te obliga a pasar si o si por wl configurador. Lo primero que haremos será pasar a un i7, mínimo 4 núcleos y 8 hilos para hacer tareas de renderizado de forma decente (sería mejor con un ryzen). Vemos que pasar a un i7 vale... ¡600€ más! La diferencia de precio REAL entre un i5 7500 y un i7 7700K es de unos 160€. Vamos con la memoria RAM. 8 GB también se quedan cortos por lo que tenemos que optar de base por 16 GB. Pasar de 8 a 16 GB DE RAM son 240€. Realmente la diferencia entre 8 y 16 GB de RAM son unos 60-70€ (ahora que la RAM esta cara, antes eran unos 40€). Vamos con el almacenamiento. Viene con fusión Drive de 1 TB. Habrá que optar si o si por SSD porque la cantidad de SSD en el fusion drive es irrisoria. En este caso los precios de la ampliación si concuerdan con los reales (hablamos siempre de SSD M.2 NVMe). Vamos a pasar a hablar de los gráficos. Apple te vende el nuevo iMac como que han mejorado mucho los gráficos y que puedes usar la VR con él. Eso sí es así ya que la RX 570 cumple con los 6 teraflops necesarios para VR, sin embargo es insuficiente para ejecutar juegos más o menos pesados en VR. En este caso para poder mejorar la gráfica tendríamos que pasar al modelo más potente, sumando 300€. La diferencia real de precio entre una RX 570 y 580 es de 80€, muy lejos de los 300€ que pone Apple.
Vemos que de esta manera Apple se ha llevado por la cara alrededor de 900-1000€.
Si a eso le sumamos la pésima refrigeración que tiene el ordenador (y lo que se calienta el i7 7700K que es muchísimo, nos sale una auténtica tostadora)
Ahora vamos a ver cuánto vale el imac más potente. Este tiene un precio de 6200€. En este caso no le veo el sentido a montar un i7 de 4 núcleos y 128 GB de RAM. No se van a utilizar.
En este caso podemos montar un equipo con las siguientes características.
-AMD Threadripper 1950X 16C/32T a 3.4 GHz con turbo a 4 GHz (unos 1150€)
-Placa base (350€)
-RAM 64 GB 3200 MHz (650€)
-SSD NVMe 1 TB (550€)
-SSD SATA 3 512 GB (250€
-HDD 2 TB (80€)
-Nvidia Quadro P5000 (2000€)
-PSU (150€)
-Caja (130€)
-RL (130€)
Esto da un total de 5440€. Con los entorno a 800€ de dinero restante podemos comprar un monitor 4K decente para edición de multimedia. Como por ejemplo un Benq que hay por 850€.