Al final no ha podido ser. Después de mucho esfuerzo y lo que tiene pinta de haber sido una carrera muy ajustada, Apple ha decidido matar el AirPower. Informa de ello TechCrunch con un comunicado oficial de Dan Riccio, vicepresidente senior de ingeniería de producto. Según el ejecutivo, la compañía "no ha conseguido ponerse al nivel" al que nos tiene acostumbrados.
Esta es la declaración completa de Riccio:
Después de muchos esfuerzos, hemos concluido que el AirPower no alcanzará nuestros altos estándares y hemos cancelado el proyecto. Pedimos disculpas a aquellos consumidores que estaban esperando este lanzamiento. Seguimos creyendo que el futuro es inalámbrico, y nos comprometemos a que la experiencia sin cables progrese.
Una decisión "in extremis"
La decisión debe de haber sido muy precipitada si los últimos rumores eran ciertos, porque se hablaba de un lanzamiento incluso para hoy mismo. Y tomarla habrá implicado tragarse mucho orgullo, porque hasta en la caja de los nuevos AirPods de segunda generación se nombra el producto.
Elegir que en la caja de un producto nuevo que ahora se está vendiendo por todo el mundo haya menciones a un accesorio que ya no va a existir debe de haber implicado una decisión muy, muy difícil desde los altos mandos de Cupertino. En otras palabras: no me gustaría estar en la piel de los ingenieros responsables de la base AirPower ahora mismo.
Los detalles concretos sobre por qué la base AirPower no se venderá no se publicarán nunca, pero es más que probable que haya sido por el sobrecalentamiento de la base. Ahora la incógnita que nos queda es si Apple desarrollará otro tipo de base de carga inalámbrica o si por otro lado abandonará ese mercado.
Apple no nos tiene acostumbrados a estas noticias, pero una cosa está clara: mejor rectificar a tiempo que no lanzar un producto que no funcione bien.
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