Estoy seguro que muchos lo habéis visto ya, la verdad es que ha sido la sensación de esta pasada semana. Google ha mostrado al público lo que ya era un secreto a voces, sus gafas futuristas. En verdad parece que de golpe y porrazo hemos llegado a aquellas películas de finales de los 70, principios de los ochenta, que presentaron un futuro en el que ya nos encontramos y cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. La pregunta de esta semana es:
¿Afectarán las gafas de Google a Apple y a su hoja de ruta?
Aunque le vea ciertos inconvenientes, y realmente no me veo utilizando unas en un futuro inmediato, he de reconocer que a mi las gafas de Google me sorprenden. Aún están limitadas, y mucho de lo que sale en su video de presentación no es posible aún realizar (o eso tengo entendido, no he tenido la suerte de probar unas). Pero la verdad es que sus posibilidades son muchas, y suponen un concepto novedoso, ¿Apple está obligada a mover ficha o no debería preocuparse?
La pregunta de la semana pasada
Mi compañero Miguel, la semana pasada nos preguntaba sobre el Mobile World Congress, que se iba a celebrar esa misma semana. Y es que la verdad, si hace cuatro años Apple sorprendió dando un paso adelante y presentando algo novedoso desmarcandose de la tónica habitual, ahora sus competidores están acercándose e incluso superando en algunos casos.
¿Creéis que las novedades que se presenten en el MWC13 influenciarán el futuro de Apple?
La respuesta más votada ha sido la de nuestro lector pdgregor hablando de la falta de novedades de Apple con respecto al iPhone 5.
Apple siempre ha ido a otro ritmo, y por lo general se aplica lo de “mejor tarde y bien que deprisa y mal” (digo por lo general porque Siri salió como Beta y de los mapas es mejor no hablar…). No me extrañaría nada que por Cupertino ya haya prototipos de iPhone con NFC, e incluso con carga inalámbrica. Probablemente ya los tuvieran mucho antes de la salida del iPhone 5, y también es probable que no veamos esas tecnologías incorporadas este año, y creo que al final puede pasarle factura. Vamos, el iPhone se seguirá vendiendo bien, pero que el nuevo modelo salga sin eso (y sin un iOS 7 que refresque la interfaz) seguirá desgastando gratuitamente la imagen del teléfono con el manido “es más de lo mismo”, como ya ha pasado con el iPhone 5 Sobre las pantallas, no me gustan las pantallas de más de 4.3”, por los móviles que he podido probar, aunque pienso que tal vez sea una cuestión de acostumbrarse (siempre que no se llegue a monstruos de más de 5”). Pero creo que antes o después, Apple terminará cediendo y ampliándola. Eso sí, viendo que los nuevos teléfonos punteros llevan pantallas Full HD, no me extrañaría que el iPhone 5S que veamos este año sea el último modelo con el tamaño y resolución actual. Creo que volverán a cuadruplicar la resolución (hasta un total de 2272×1280) para que al aumentar la pantalla no se pierda definición, o que incluso se gane. Y aunque la cifra resultante pueda poner los pelos de punta, en realidad no es mucho más grande que 1920×1080, así que me parece factible. Pero, como digo, creo que aún queda una iteración en medio.
Aprovecho para recordaros que los comentarios están cerrados, por lo que si queréis aportar vuestro granito de arena dando vuestra opinión debéis hacerlo en la sección respuestas. A continuación os pongo el enlace a la pregunta.
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