La presentación de los resultados financieros del tercer trimestre de 2018 y final del año fiscal de Apple han traído nuevos récords para la compañía. Los ingresos crecieron casi un 20% mientras que los beneficios lo hicieron casi en un 32% comparados con el año anterior, una auténtica locura.
Sin embargo, la compañía ha anunciado varias medidas a la hora de divulgar sus resultados que se estrenarán en este nuevo año fiscal. Entre ellas, Apple dejará de informar sobre las unidades vendidas de iPhone, iPad y Mac de ahora en adelante. Veamos cuál es el razonamiento detrás de esta medida.
Cuatro nuevas medidas en el reporte de resultados de Apple
Tras el comentario inicial de Tim Cook, el CFO de Apple Luca Maestri hizo un repaso a los números más inmediatos del trimestre. También anunció cambios en la forma de reportar sus resultados, en concreto estas cuatro medidas (puedes consultar una transcripción en inglés aquí):
- Apple comenzará a divulgar los costes además de los ingresos tanto de productos como de servicios. Esto significa que los analistas podrán ver cuál es el margen de ambos grupos, una información muy interesante que antes no estaba desglosada.
- Los ingresos y costes de servicios como iCloud, Mapas o Siri que antes estaban incluidos en Productos, pasarán a Servicios. Supone un traslado de cifras de una categoría a otra de menos del 1% de ingresos totales de la compañía. Este cambio no estaba contemplado en el objetivo de duplicar los ingresos de Servicios de 2016 para 2020.
- Apple dejará de dar el número de unidades vendidas de iPhone, iPad y Mac. Según la compañía, los resultados financieros son consecuencia de "crear grandes productos y servicios que enriquecen la vida de las personas" para obtener clientes muy satisfechos. Junto con esto, creen que las unidades vendidas en 90 días no es representativa de la solidez del negocio dada la amplitud de precios en cada categoría.
- El segmento Otros pasará a llamarse Wearables, Hogar y Accesorios para "proporcionar una descripción más precisa" de lo que se incluye en esta categoría. No es más que un simple cambio de nombre, aunque el orden de los productos es revelador.
De todas estas nuevas medidas, que Apple deje de informar de las unidades vendidas es la que más atención (y rebeldía) ha generado entre los analistas. Muchos argumentan que esta decisión es la que ha provocado un descalabro de más de 15 dólares en bolsa previa a la apertura de la sesión de hoy.
![Wall Street se disculpa por sus estimaciones erróneas de Apple mientras Warren Buffett se llena los bolsillos con AAPL [Actualizado]](https://i.blogs.es/a2c1f2/wall-street-se-disculpa-con-apple/375_142.webp)
Aunque parte de esa culpa la tiene también el guidance más bajo de lo esperado para el trimestre navideño: 89.000-93.000 millones de dólares cuando los analistas esperaban 93.000 millones de media. La pregunta que se hace todo el mundo ahora es el porqué de esta decisión. Vamos a desgranarla.
Contexto y precedentes de esta medida
Toda compañía que cotiza en bolsa está obligada a proporcionar una información mínima a accionistas. Entre esa información obligatoria no se encuentra las unidades vendidas, pero sí los ingresos de una determinada categoría cuando supera cierto umbral del total.
De hecho, Apple era la única compañía tecnológica que divulgaba información trimestral acerca de las unidades vendidas de sus tres grandes categorías: iPhone, iPad, Mac. Ni Samsung, ni Microsoft, ni Google lo han hecho o hacen con sus productos de hardware. Lo cual no impide que de vez en cuando revelen ciertas pistas o datos concretos ante sus inversores. Cosa que seguramente pase a hacer Apple a partir de ahora.
Esta retirada de información no es única en el caso de Apple. En 2005, la compañía dejó de desglosar las ventas de Mac por familia de productos (PowerBook, Power Macintosh, iMac y iBook); en 2013 dejó de informar sobre cuál era el reparto de Mac entre portátil y sobremesa; en 2015 dejó de informar sobre las ventas procedentes de sus Apple Store.
Por tanto, no es inusual ni tampoco sorprendente que cada cierto tiempo decida modificar la forma de reportar sus resultados financieros. Todo obedece a su intención de controlar la narrativa de la compañía ante los inversores.
Objetivo: controlar la narrativa ante Wall Street a largo plazo
Las narrativas en bolsa son importantes. Toda compañía cuenta una historia de cara al público inversor y siempre lo hace desde el punto de vista más positivo posible con los datos de negocio que tiene a su disposición y está obligada a divulgar. En los últimos años, Apple ha comenzado a girar esa narrativa hacia otros puntos de su negocio.
Los ingresos en el último año han roto todos los récords, empujados por el iPhone, servicios y otros productos.
El movimiento no es casual. Conforme pasan los años, el negocio de Apple evoluciona y el mercado también. Apple pasó de ser una compañía que vendía Mac a una compañía cuyo negocio principal era el iPod. Después, el iPhone cobró protagonismo. Y ahora, cuenta con varios negocios que suman miles de millones de dólares cada año. En el último año fiscal:
- iPhone: 166.699 millones de dólares.
- iPad: 18.805 millones de dólares.
- Mac: 25.484 millones de dólares.
- Servicios: 37.190 millones de dólares.
- Otros: 17.417 millones de dólares.
Evidentemente, el iPhone sigue siendo el principal generador de ingresos de lejos. Pero es que el resto de divisiones suponen un 40% del total. A pesar de esto, el mercado del smartphone lleva años plano o en ligero retroceso. El crecimiento fácil ha terminado. Apple ha ido contracorriente ampliando la gama de precios del terminal, sobre todo en la parte superior, lo cual ha hecho crecer los ingresos mientras las unidades vendidas permanecían planas.
En previsión de un estancamiento, la compañía lleva varios años tocando el tambor de los servicios y su importancia en el core del negocio para desplazar la narrativa. Apple ya no quiere ser vista como la "Empresa-iPhone". Uno podría argumentar que no le gusta que se les ponga la etiqueta de que son un producto concreto, ya que en el pasado ha sido la "Empresa-Mac", "Empresa-iPod" e incluso "Empresa-iPad" momentáneamente. Pero los productos vienen y van, mientras que Apple evoluciona y pasa de categoría a categoría o, como en la actualidad, a varias de ellas.
En términos de unidades vendidas, el iPhone, iPad y Mac llevan planos o en negativo varios trimestres.
Que Apple ponga una atención mayor en Servicios y, de hecho, vaya a dar más información sobre ellos a través de los márgenes, no significa que aspire a ser la "Empresa-Servicios". Simplemente es una forma de decir "Eh, esta parte de negocio está creciendo como un cohete, mirad todo lo que implica". Porque el crecimiento en Servicios supone la traducción financiera de una parte muy significativa del esfuerzo de Apple:
- Más venta de apps y suscripciones (incluyendo su corte de Netflix y parte de Spotify entre otros).
- Apple Music como forma de entretenimiento.
- iCloud.
- AppleCare y Apple Pay.
- Licencias y otros servicios.
Sin olvidarnos de sus planes alrededor de una suscripción para Apple News y su futuro servicio de series en streaming. Bajo este prisma, resulta mucho más importante conocer la base instalada y activa de usuarios. Porque esos usuarios son quienes consumen servicios con cada vez mayor voracidad.
Con esta perspectiva, no es extraño que Apple deje de proporcionar las unidades vendidas de sus principales productos. Distraen de la nueva narrativa que quiere construir la compañía y que, a sus ojos, mejor sirve a estos intereses. En el corto plazo, están dispuestos a aguantar el chaparrón de críticas y conclusiones desacertadas que se vaya a producir. Pero al largo, aspiran a darle una nueva historia a los inversores de la compañía. Una más jugosa y emocionante.
Imágenes | Patrick Ashley, Chmpgnrose, Divya Thakur, Daniel Torres Bonatto, Hugo Cadavez.
Ver 46 comentarios