¿Qué os ha parecido el nuevo iPad? ¿Pertenecéis a las hordas de maqueros sumamente cabreados con Apple y Steve Jobs por jugar con nuestros pobres sentimientos para finalmente lanzar algo que no cumple las expectativas o por el contrario estáis encantados con lo que se ha presentado? Yo me encuentro actualmente un poco en mitad de ambos mandos y mientras decido con cual me posiciono he tenido la idea de plasmar en dos listas las diez cosas que más y menos me gustan del esperado tablet. ¡Empecemos por las que me sacan de mis casillas!
1. Safari y Flash. Durante la presentación se hizo patente la ausencia del plugin flash en el navegador de Internet, una ausencia que Apple ha justificado en el iPhone escudándose en la autonomía de la batería y los recursos que consume pero que en el iPad pierden toda razón de ser. No soy el mayor defensor de Flash pero cerrar puertas porque sí me parece completamente injusto para muchos desarrolladores y usuarios.
2. Multitarea. Mismo caso que con Flash, que si la autonomía tal, que si la respuesta de las aplicaciones cual. Por favor, quiero poder esperar a que un amigo se conecte a Skype mientras navego por Internet o juego a la nueva versión de Nova. Si el nuevo procesador Apple A4 de 1 GHz no es capaz de eso, mejor que le quiten el nombre de un coche de Audi.
3. Pantalla 4:3 y salida de vídeo. Me encantó ver como más de la mitad de la película de Star Trek desaparecía al no encajar de ningún modo en esa pantalla con una relación de aspecto de 4:3. Las películas en 16:9 (el mismo formato que ya utilizan los iMac) nos regalan unas bonitas bandas negras que desperdician buena parte de la pantalla y en casos como la de J.J.Abrams, de 2.40:1 (aún más panorámica) la cosa alcanza cotas ridículas.
4. Libros electrónicos... ¿a medias?. Aunque muchos consideráis un error la elección de una pantalla LED para un dispositivo destinado (en una décima parte) a la lectura, a mi particularmente no es algo que me preocupe. He leído decenas de libros en la minúscula pantalla del iPhone y sigo sin necesitar gafas así que con una pantalla de mayor tamaño la cosa solo irá a mejor. Lo que me preocupa es que la aplicación iBooks no sea compatible con otros formatos además del ePub, como el PDF o txt, y que incluso para el caso de los ePub, tengamos que pasar forzosamente por la caja de la iBookstore, sin posibilidad de transferir al iPad los libros que ya tenemos actualmente.
5. Espacio común de aplicaciones. En el iPhone ya es una carencia que empieza a notarse y aquí será peor. Cada aplicación funciona en un sandbox que la aisla de las demás y tan solo puede guardar sus datos en un espacio reservado para si misma (además de en la galería de fotos, la agenda y algunas excepciones más). El problema es que no está nada claro como accederemos a los archivos de aplicaciones como Pages, Keynote o Numbers. ¿Sincronizando con iTunes? ¡No por favor! Quiero ver mis documentos como lo que son, documentos, no una lista de casillas seleccionables en otra pestaña más de iTunes (y van...). Actualización: Revisando la documentación para desarrolladores he visto que el iPad se muestra como una unidad en el escritorio de nuestro Mac o PC y que dentro tiene una carpeta para cada aplicación que comparta archivos. La pregunta ahora es, ¿qué pasa si copiamos el archivo a otro lado? ¿Y si creamos una subcarpeta dentro de esta...? Es un poco raro. Seguiré investigando pero no suena una forma demasiado "Apple" de hacer las cosas.
5 (El Imperio Contraataca). Sincronización inalámbrica. Está muy bien eso de que la batería le dure una eternidad pero lo más probable es que la cargues cada dos por tres aunque no lo necesites para transferir un archivo o sincronizar el iPad con el ordenador. En mi caso particular utilizaría el iPad para el salón, navegando, leyendo un libro o viendo una película mientras mi novia ve la televisión así que tener que abandonar el calor de la manta en el sofá para conectarlo al Dock definitivamente es un atraso.
6. Teclado virtual. No voy a ponerme a discutir a estas alturas sobre si Apple debería o no encontrar la forma de integrar un teclado físico deslizable en sus dispositivos móviles. En el iPhone y el iPod touch, el teclado virtual cumple con su cometido y aunque nunca llega a ser tan cómodo como uno físico, es de lo mejorcito visto hasta la fecha. El iPad, con su pantalla de mayor tamaño ofrece un teclado virtual ampliado en el que deberíamos de escribir con mayor comodidad, pero atención, por que al menos en la versión inicial, este espacio extra no se aprovecha para incorporar los caracteres especiales de idiomas como el nuestro. ¿Os imagináis escribir un documento en el nuevo iWork teniendo que mantener pulsada la tecla N para seleccionar la Ñ? ¿Y para poner las tildes? Pues eso es lo que hay.
7. Teclado físico. Los accesorios diseñados por la propia Apple para el iPad son muy cucos y tal pero... ¿en serio es necesario lanzar un Dock con teclado integrado? Especialmente cuando ese teclado es una copia exacta de un producto que ya existe, el Apple Wireless Keyboard, que no solo viene incluido de serie con los iMacs sino que también puede adquirirse independientemente sin problemas. Como propietario de uno de estos teclados, ¿se supone que debo volver a gastarme el dinero y adquirir el nuevo Dock? ¿Acaso no tiene el iPad Bluetooth? Pues eso. Actualización: Sí que existe la posibilidad de conectar el Wireless Keyboard mediante Bluetooh al iPad. Mea culpa.
7 (El Retorno del Jedi). Tecnología multi-táctil. Estaréis de acuerdo conmigo en que la tecnología de Apple en este campo es una maravilla, bastante mejor que todas las demás que he tenido la oportunidad de probar con mis propios dedos. Sin embargo, nada es perfecto y para según que cosas (dibujar, tomar apuntes...), un stylus también sería una bendición. Existen los stylus capacitivos pero con ellos tan solo podemos hacer lo mismo que hacemos con los dedos y no lo más importante: reconocimiento de escritura. ¡Si hasta el Newton lo tenía! Ya va siendo hora de implementarla de nuevo, ¿no?
8. Diseño del iPad OS. El sistema operativo del iPad, una versión ligeramente modificada del iPhone, tiene un montón de virtudes y seguro que tiene una curva de aprendizaje tan buena como la del teléfono de Apple, lo que lo hace perfecto para usuarios poco versados en las bondades de la era de la informática. Sin embargo, hay unas cuantas cosas que no son propias de la compañía y que me dejan un poco frío: la distribución de los iconos en la pantalla hace que se vean como esparcidos por la pantalla, demasiado separados entre si; los iconos cuadrados tienen sentido en el iPhone pero en una pantalla de casi 10 pulgadas empiezan a chirriar, ¿no quedan horribles los de iWork encajonados dentro de esos cuadrados azules? ¡Quiero que puedan ser iguales que los de Mac OS X!; los menús desplegables estilo aplicación de iPhone con una flecha encima son... raros; y la pantalla de inicio necesita un rediseño con la posibilidad de integrar widget o algo similar como que ya.
9. Precio el iPad 3G. 130 dólares de diferencia entre cada modelo WiFi y su equivalente con conectividad 3G sencillamente es un abuso injustificable, sobretodo si tenemos en cuenta que, aunque sería un poco raro hacerlo, tampoco podríamos hacer llamadas si nos diese por ahí.
10. Cámara. Si esta fuese una lista ordenada seguramente la ausencia de una cámara no ocuparía la décima posición sino la primera. Señores, estamos en el 2010 y una cámara como la que incorpora el iPhone 3GS no cuesta más de 5 euros. Me importa poco poder hacer fotos, el iPad no es para eso (aunque tendría interesantes funciones de cara a la realidad aumentada) pero por favor, ¿tendremos que esperar al 2020 para hacer videoconferencias por Skype? Con el mismo trabajo que se le integra un micrófono, que lo tiene, se le añade la cámara y una versión de iChat. Me niego a creer que sea tan difícil y parece que hasta ellos también lo consideraron.
Steve, ¿necesita Apple un poco más de magia?
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